Han pasado días desde aquella transformadora interacción entre Tessa y el dron. Acogido en el santuario de su mansión, el dron se encontró vestido con la ropa de sirviente de los drones que trababan por la mansion, un símbolo de aceptación y pertenencia. Con delicado cuidado, Tessa se encargó de arreglar su cabello, reparando el daño infligido por el tiempo y el abandono.
Agradecido por los gestos de Tessa, el dron permanecía en silencio y ágil, sus experiencias de estar restringido y aislado dejando una marca duradera en su psique. Se había acostumbrado a los confines de su cautiverio, solo pudiendo aventurarse unos metros lejos del árbol al que había estado atado. Aunque logró liberarse de la cuerda común, las restricciones de metal permanecían, recordándole constantemente su encarcelamiento pasado.
A pesar de su visible presencia física, el dron poseía una cualidad casi etérea, sus movimientos envueltos en un sigilo misterioso. Tessa aún no había presenciado toda su gama de capacidades, pero los sutiles indicios de su agilidad eran suficientes para despertar su curiosidad. Sin embargo, a pesar de sus habilidades ocultas, eligió permanecer firmemente a su lado, sabiendo que los padres de Tessa tenían reservas sobre la presencia de un robot aparentemente aleatorio proveniente del depósito de chatarra.
La desaprobación de sus padres pesaba en la mente de Tessa, pero su creencia inquebrantable en el potencial del dron eclipsaba cualquier duda. Reconocía la bondad innata en él, el potencial de crecimiento y cambio que desafiaba las percepciones de los demás. Con cada día que pasaba, su vínculo se profundizaba, su conexión fortalecida por experiencias compartidas y una comprensión mutua de las incertidumbres del mundo.
Su vínculo se profundizaba con cada día que pasaba, creciendo más allá de la simple compañía. El carácter alegre de Tessa seguía siendo una fuente constante de alegría, y N, aunque en silencio, era una presencia atenta, siempre dispuesto a ayudarla de cualquier manera posible. Su compromiso con el bienestar de ella se extendía a ayudarla en sus creaciones, ofreciendo su experiencia técnica para dar vida a sus inventos.
Con el tiempo, Tessa comenzó a ver a N no solo como un compañero, sino como un querido hermano. El afecto entre ellos era palpable, su conexión forjada a través de experiencias compartidas y comprensión no verbal. Sin embargo, los padres de Tessa se mantenían cautelosos, sin poder comprender completamente la profundidad de la relación que había florecido entre su hija y el enigmático dron.
N, aún en proceso de reparación y restauración, aún no estaba presentable ante los padres de Tessa. Reconocían que necesitaba más tiempo antes de ser presentado formalmente en la mansión como un sirviente de confianza. La espera estaba llena de anticipación, ya que tanto Tessa como N anhelaban el momento en que pudieran pasar más tiempo juntos abiertamente.
Durante este período intermedio, Tessa y N apreciaban cada momento robado, disfrutando de la compañía secreta que compartían. Exploraban los extensos terrenos de la mansión, descubriendo rincones ocultos y entablando conversaciones susurradas, su vínculo fortaleciéndose con cada día que pasaba.
A medida que las reparaciones de N se acercaban a su finalización, llegó el día en que finalmente se consideró presentable ante los padres de Tessa. Con su nueva elegancia y funcionalidad, se integró sin problemas en su papel de sirviente dentro de la mansión. Sin embargo, en un acto de afecto protector, Tessa insistió en presentarlo como su propio sirviente personal, manteniendo oculta su profunda conexión de miradas indiscretas.
Los padres de Tessa, aunque inicialmente escépticos, finalmente accedieron a su solicitud. Confíaban en el juicio de su hija y veían la alegría que irradiaba cada vez que estaba en presencia de N. Con este arreglo, se le otorgó a N la oportunidad de pasar más tiempo con Tessa, ya no confinado únicamente al taller, sino acompañándola por toda la extensa mansión.

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Murder Drones: Un Nuevo Comienzo - Origenes (Español)
FanfictionCon diversos problemas y una multitud de dificultades surgidas de errores pasados, N se encontraba sumido en un mar de vacío. Pero guiado por el inquebrantable apoyo de Tessa y su implacable determinación, emprendió un viaje transformador hacia el a...