ᴍ ᴀ ᴅ ʀ ᴇ ꜱ―ʸᵒᵘⁿᵍ ᴹⁱᵏᵒ

-06-

¡family camp!

—Muy bien familia, ¡¿quien está preparado para el mejor campamento del mundoooo?! —exclamó Victoria agitando sus brazos.— Y bienvenida Sophie al primer viaje familiar.

— Gracias señora V.

— ¿Por que..?

— V de Victoria, y señora porque.. ya es una señora.

— Atájame, Muriel. —La castaña agarró el brazo de su esposa, así evitando que Victoria golpee a la novia de su hija.— Ya estoy calmada.

Se separó de su esposa aun viendo fijamente a Sophie, quien sonreía sin entender lo que había pasado y junto a ella se encontraba Arena totalmente avergonzada.

— Hola tórtolos. —Apareció Samuel con tres maletas a sus costados, más una gran mochila por sus espaldas.

— Samy, cariño, ¿por qué tantas maletas?

— ¿Bromeas? ¿Qué pasa si chocamos y quedamos inconscientes por mucho tiempo, y al momento de despertar estamos en el apocalipsis zombie? Aquí este bebé lleva todos los cuchillos de la casa.

— A veces me pregunto por que adoptamos a tres niños. —susurró Victoria ganándose un codazo por parte de su esposa.

— Samuel ve a poner los cuchillos en su lugar y otras cosas que seguro trajiste de la casa.

— Solo la licuadora por si quiera tomar algo en el camino.

— Para eso existen los jugos en cartón, ahora ve a la casa ya.

— ¡Ah! Si es nada más y nada menos que la familia Ramirez, ¡enemigos! Oh querida Julieta, pelearé contra tu familia para tenerte en mis brazos, ¡os prometo que esto no se quedará así! —El de medio los apuntó con su dedo índice.— ¡Peleare por vuestro amor, Julieta!

— Oh Olili, nuestros corazones laten ¡Para que te subas al auto ya! ¿Y que llevas puesto?

— ¿Que? ¿que tiene de malo?

Miró su ropa, él estaba vestido igual que Romeo.

— Debo practicar para mi obra.

— Ya no hay tiempo para cambiarse. Todos suban al auto ahora.

{...}

— ¡SALE EL SOL, EY, Y YO CON UNA NUBE GRIS. NENA TE EXTRAÑO EN MI VIDA COMO NIUYORICAN EXTRAÑA AL COQUI.. !

Victoria, Samuel y Sophie iban cantando a todo volumen, lo cual empezaban a hartar a los integrantes de la familia. ¿Qué tal si se acostumbraban a cantar cada que viajan? Es mejor ir por separado.

Oliver miró a su mamá, y miró la radio, su vista volvió a su mamá y apagó la música escuchando las quejas de Samy, Vicky y Sophie.

— No me dejan practicar mi obra. —reclamó Oliver , miró a la novia de su hermana y sonrió.— Sophie, ¿puedes ser Julieta?

— Claro, ¿que hace ella?

— Muere. —respondió Muriel. Definitivamente a ella no le caía bien la chica.

— ¿Entonces debo hacerme la muerta? —preguntó inocente sacándole un bufido al puertorriqueño.

— ¡Mamá! —gritó Arena asustando a Victoria quien se desvió un poco del camino, asustando así a toda la familia.

— ¡Victoria mira el camino!

— ¡¿Are, cariño, estás bien?! ¡¿Que pasa?!

— Es que quiero ir al baño. —Dijo la mayor como si nada.

Samuel se acercó a su hermana golpeando su cabeza. Arena pensando que fue a propósito, lo cual si fue, también golpeó su cabeza.

— ¡Oye!

— ¡Samuel quita tu trasero de mi cara! —chilló Oliver empujándolo.

— ¡Auch mi trasero, tonto! —llevó su pierna al rostro de su hermano. Oliver respiró profundamente antes de perder la paciencia.

Llevó sus manos al cabello de Samy jalándolo de un lado a otro, mientras que el niño golpeaba su rostro con pequeñas bofetadas defendiéndose.

— ¡Oigan me lastiman! —ambos hermanos se quejaron al momento de sentir sus cabezas por el vidrio del auto.

— ¡Arena! —Samuel se lanzó sobre su hermana y mordió su brazo dejándole una marca.

— ¡¿Acaso me mordiste, estupido zombie?! —parpadeó incrédula, mientras Oliver reía tranquilamente viendo a sus dos hermanos golpearse.

— ¡Ya basta! —gritó Victoria deteniendo el auto.— ¡Oye!
La Peliblanca giró su cabeza encontrándose con sus tres hijos peleándose. Oliver reía aún vestido de Romeo, Arena y Samuel pararon los golpes para fingir abrazarse, mientras que Sophie tenía una sonrisa en sus labios como si nada hubiera pasado.

— Abajo, reunión familiar ¡ya!

La familia bajó del auto de mala gana, los tres chicos ya esperan una gran regañada de sus madres.

— No puedo creer que no podamos ni siquiera viajar.. ustedes como hermanos deberían evitar estas peleas. Y me duele lo que voy a decir porque son mis hijos y mi corazoncito es muy blando, así que Muriel dilo tú. —miró a su esposa.

— Gracias, Vicky. —rodó lo ojos.— Lo que su mamá quiere decir..

— No, no. Lo que tú dices.

— Agh, ¿saben que? Ya me canse de sus tontas peleas infantiles. Hagan lo que quiera, yo solo quiero disfrutar del campamento.

Sujeto de manera fuerte su mochila y volvió a subirse al auto con una sonrisa que daba miedo a su familia. El resto compartió miradas de confusión por el repentino cambio de humor de Muriel.

Victoria bufó.— Arena hay una gasolinera por aquí cerca, entren todos al auto para llegar lo más rápido al baño.

[...]

— ¿Ya? ¿Todos listos? —preguntó la Tatuada viendo a sus tres hijos subir el auto.

— Si, ahora vámonos. —dijo Muriel mientras colocaba una música a todo volumen. Algo estaba pasando.

Victoria la miró y solo asintió arrancando el auto. Condujo algunos metros antes de que chillido de Arena la hizo detener.. otra vez.

— ¡olvidamos a Sophie! ¡retrocede mamá!

— Arranca, Victoria. —ordenó la castaña. Victoria la miró con duda, y suspiró.

— ¡rápido mamá atrás!

— ¡arranca, Victoria!

— ¡Ah! ¡¿que hago?!

— ¡retrocede!

— ¡arranca!

— ¡Oh Julieta.. !

— ¿y si compramos helados? —propusó Samy mirando a sus mamás.

— ¡arranca!

— ¡retrocede!

— ¡NO ME SIRVE UN ABRIGO, SALE EL SOL Y YO SIGO CON FRIO! —cantó Victoria cerrando sus ojos con fuerza antes de tomar una decisión.— ¡Por por ti Sophie! ¡DAME TU AMOR TE JURO QUE LO CUIDO!