Solo fue una flor

18 5 0
                                    

Una margarita, un amor infantil.
Tan pequeña, tan bonita, tan sutil.
Con sus pétalos se decidían sentimientos,
que parecían ser siempre los correctos.
Mientras jugábamos al sol en las tardes de abril
años más tarde, con el canto de un colibrí
me regalaste una rosa color carmesí
y sin pensarlo dos veces te dije que sí.
Todo era precioso, y yo era muy feliz.
Poco a poco de flores se iba llenando mi jardín
e iba floreciendo la belleza juvenil.
El tiempo pasó
y con un gran girasol
me pediste jurarte para siempre mi amor.

Rubor, pasión, dolor.
Te encontré dándole a otra una flor.
En pedazos se rompió mi joven corazón
y decidió huir, sollozando, sin decir adiós.
Mi jardín se convirtió en un cementerio de flores muertas,
las rosas color carmesí ahora eran negras,
murieron los pájaros que vivían en mi cabeza
y en mi tripa las mariposas ya no daban vueltas.
Ahora, mientras le regalas a ella un lirio
estoy escribiendo mi carta de suicidio;
Mientras me acuerdo de tus ramos y promesas
me siento como una violeta, débil y pequeña.

Me duele dolerteNơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ