Días pasaron desde el nacimiento del pequeño hijo del principe, y pareciera que todo iba bien, aunque siempre tengan en mente lo de su descuido ambos padres estaban felices de que cada día su pequeño se encuentre bien, y ni mencionar que aquél que ahora es su abuelo no deseaba que viniera al mundo realmente lo cuidaba mucho, ya sea cerca o distante aquel empezó a querer a aquel pequeño, irónico no?
Pero había algo que preocupaba a ambos padres, pero sobre todo el pelinegro, claro el pequeño esta sano, no ha pasado nada malo, pero su preocupación era más sobre el hecho que no ha abierto sus pequeños ojos
D. Choco: esto es normal señor Vainilla?
El joven pelinegro estaba en la habitación del pequeño mientras este dormia, junto a aquel rubio que seguia viniendo a este reino para ayudar en el estado del pequeño si seguia sano cada cierto tiempo
P. Vainilla: Claro, no tienes que preocuparte tanto mi muchacho, no todos los bebés al momento de salir del horno abren los ojos, por ejemplo tu mismo, también tardaste en abrir tus ojos
D. Choco: mmm... Supongo que será hereditario no es así?
P. Vainilla: Es posible, pero como mencioné no tienes que preocuparte tanto, en cualquier momento los abrirá
El joven pelinegro simplemente no mencionó nada más o nisiquiera en responder algo ante ese momento, era obvio que no se siente tranquilo ante eso
P. Vainilla: Entiendo que te preocupes por el, pero te aseguró que le pasa nada malo solo tienes que esperar a que sea el momento
D. Choco: ... Eso espero
P. Vainilla: bien! me hubiera gustado estar en el momento pero necesito hacer otras cosas así que lo siento pero me tengo que ir mi muchacho
D. Choco: no no, descuide enserio muchas gracias por venir
Aquel pelinegro solo vio como el rubio se retiraba y a su vez su esposo entraba en la habitación con un té en sus manos
R. Velvet: Espera ya se va? Tan rápido?
D. Choco: lastimosamente si
R. Velvet: oh... Bueno entonces toma, pensaba que el señor vainilla se iba a quedar más tiempo -menciono dejando aquel té en una mesa-
D. Choco: si... Yo también pensé eso, pero me menciono que tenía otros pendientes
R. Velvet: Y te menciono algo más?
El pelinegro volteo a ver la pequeña cuna, para luego volver a ver hacia el pelirojo
D. Choco: que no me preocupara tanto de él
R. Velvet: Creo que ya se que es lo que hablaron no? Descuida tarde o temprano llegará a abrir sus ojos solo necesitamos paci-
Aquel no terminó ya que escucho como el pequeño empezó a despertar, no era de sorprenderse para ellos que el pequeño esta vez se colocó de lado y para sorpresa de sus padres porfin estaba abriendo sus ojos o bueno almenos uno
Tanto el pelirojo y el pelinegro esperaban ver que tuviera el color de alguno de ellos pero al parecer el destino no quería que fuera así, ya que el pequeño al abrirlo su único ojo abierto en ese momento era de un color morado, oh pobre, tanto tiempo con su abuelo hizo que tuviera el mismo color de ojos de él, o lo más lógico es que por los genes de sus padres llegaron a ser morados
R. Velvet: ...Por el amor a los dragones, esto debe ser una broma!
D. Choco: ... Esto es lo que merezco por odiar a mi padre?
En ese momento también pasaba aquel hombre pelinegro ya que escucho el grito del pelirojo, buena idea? No creo que no
D. Cacao: todo bien?
Aquel no recibió respuesta alguna, en cambio recibió una mirada molesta de parte del joven pelirrojo
D. Cacao: ... Parece que si...
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