¿Por qué me evitas? ★Karlnap★

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Era una mañana tranquila, los rayos del sol entraban por la ventana, y un aire fresco azotaba las ramas de los árboles.

Karl se levantó, un poco cansado porque se acostó muy tarde, bajo a la cocina a paso lento. Allí está Sapnap haciendo el desayuno, en boxers.

-Buenos días Karl-dijo Sapnap sin voltear, ¿cómo sabía que estaba ahí? Karl se puso nervioso y salió corriendo de vuelta a su habitación.

-Karl?-dijo Sapnap preocupado, a Sapnap no le pareció raro que reaccionara, últimamente siempre hacía eso, ya le estaba empezando a molestar más bien a doler.

Sapnap cogió una bandeja y puso el desayuno que le hizo a Karl en ella, subió las escaleras y se puso delante de su puerta.

-Karl, tengo tu desayuno, ¿puedo pasar?-como esperaba no hubo respuesta, dejo la bandeja en el suelo -Tienes tu desayuno ahí, yo me voy a comer el mio-tampoco hubo respuesta.

Cuando se aseguró de que Sapnap se había ido, Karl abrió la puerta y cogió la bandeja, le dolía hacer esto pero era incapaz de ver a Sapnap semidesnudo.

Sapnap se sentó en la isla de la cocina para comer su desayuno, estaba triste, Karl ya no quería verlo, se la pasaba en su habitación y cuando salía, si él estaba ahí, salía corriendo como si le fuera hacer algo. Sapnap había dejado de hacer directos estaba demasiado triste para hacerlos. Su mejor amigo, el chico que le gustaba le estaba evitando, después de mucho pensarlo Sapnap estaba decidido a enfrentarlo.

-Karl voy a hacer unas compras- Sapnap tenía esperanzas de que esta vez sí contestará pero no lo hizo.

Había pasado 30 minutos desde que Sapnap se había ido, Karl salio de su habitación a comer algo, todo estaba en silencio, bajo las escaleras y se sintió extraño pero lo dejo pasar, cuando llegó abajo se fue directamente a la cocina y se preparó un sándwich, se disposo a volver a su habitación, pero cuando paso por el baño sintió como alguien lo llevaba hacia el.

-¿Sapnap?-dijo Karl muy asustado

-Lo siento por asustarte pero esta es la única forma de poder hablar contigo-karl ahora está sorprendido, ¿Sapnap quería hablar con él?, ¿De que? muchas preguntas pasaron por su cabeza y Sapnap no pensaba responder ninguna.

-Estas muy raro, ¿te e echo algo? ¿por qué no quieres hablarme?-karl no supo que responder, salió corriendo de vuelta a su habitación, dejando a Sapnap ahí solo, triste y preocupado.