Amor de fan (Neymar Jr y Tu)

Capítulo 26 (SEGUNDA TEMP)

Narra Valeria:

James no dijo nada, volvió a tomar sus maletas y las coloco cerca de las mías, me tomo del brazo y me jalo hacia él.

-¿Qué hace el aquí? -me susurro-

Encogí los hombros.

-Me viene a acompañar -sonreí- ¿No te molesta verdad? -cruce los brazos-

-Pues sabes que cualquiera que se acerque a ti me molesta.

-¿Quién eres tú para decirme con quien debo ajuntarme? -arquee una ceja-

El suspiro.

-Soy el padre de tu hijo que también es mi hijo -sonrió victorioso-

-Eso no significa que debes meterte en mi vida, lo siento James -arrugue la nariz y me fui donde las chicas-

Escuchamos el nombre de nuestro vuelo, luego de cinco minutos ya estábamos adentro del avión, estaba nerviosa pero sabía que todo estaría bien.

Narra Neymar:

Cuando llegamos a Brasil me sentí estupendo, el ambiente era tan diferente a España, sonreí, Bruna llevaba a Camille entre sus brazos, habían algunos fotógrafos esperándonos, no quería hablar, lo único que quería hacer era llegar a casa de mis padres.

-¡Neymar! ¡Neymar! Felicidades por esa bella hija.

-Muchas gracias -sonreí y seguí caminando-

Llegamos a nuestro auto, abrí la puerta y deje que Bruna entrara primero, luego entre yo, rápidamente nos fuimos de ahí y llegamos a casa, sonreí.

-¡Neymar! -salió mi madre con una sonrisa-

Abrí la puerta, ella me abrazo fuertemente.

-A mí también me alegra verte mama -sonreí-

-Si hijo, Hola Bruna, ya veo que estas recuperando tu forma -sonrió-

-¿Enserio? Muchas gracias -dijo alegremente-

-Y miren esa bella nena, ven a los brazos de tu abuela mi amor -dijo cargando a Camille- vamos entren, hice tu postre favorito Ney.

-¿Pastel de chocolate con mantequilla de maní?

-Exactamente -sonrió-

-Genial -sonreí-

Narra Valeria:

Cuando aterrizamos, estaba muy feliz, volver a Brasil me ponía muy alegre, cuando bajamos del avión fue extraordinario, todo era tan diferente a Alemania.

-Hogar, dulce hogar -sonrió Lucy-

-Qué bueno es volver -comento Mar-

Cuando llegamos a casa fue realmente algo raro, volvería a casa como una persona totalmente nueva, con un hermoso hijo y con dos jugadores.

-¿Segura que no quieren entrar? -Pregunte-

-No Vale, ya debemos ir a casa -sonrió Mar- fue increíble verte y conocer a ese hermoso nene.

-Gracias a ustedes por ir a verme -sonreí-

-Recuerda que eres una estupenda mujer Valeria -sonrió Lucy-

-Gracias -sonreí-

Las chicas se fueron dejándome sola con ambos jugadores, suspire y los mire.

-Antes de entrar quiero pedirles un favor.

Ellos cruzaron los brazos.

-No se metan en problemas, no aquí, no en mi país, ya tuve muchos problemas antes -los señale, ellos asintieron con la cabeza- está bien -suspire- hagamos esto -tome la perilla y abrí la puerta-