Medio Paso

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Blanca: 

Llevábamos dos semanas en Fort Drum y la verdad, no me acostumbraba demasiado. Por la mañana estaba ocupada, porque estaba trabajando desde casa, pero extrañaba almorzar con él, extrañaba sus mensajes, a veces me llamaba una vez o me enviaba un mensaje, y otras veces pasaba todo el día sin saber nada. Las chicas también trabajaban desde casa, en el caso de la empresa que era de Patrick, Chris y Adam, sus padres volvieron a trabajar solo para ayudarlos, y las chicas ayudaban desde aquí.

Todas las tardes veía a Sara, mis sobrinos casi no nos prestaban atención, por la mañana asistían al colegio que estaba aquí, y por la tarde andaban en sus bicicletas o corriendo y explorando el lugar con los tanquecitos Andrew, más otros niños que vivan aquí también, ellos estaban totalmente felices de la libertad que tenían aquí, ni que hablar de lo fascinados que estaban de ver militares por todos lados. El primer fin de semana aquí, Erick, Max y Chris trabajaban, así que se iban el sábado y regresaban el lunes, no es que se iban a ningún lado, estarían aquí, pero entendí que era algo como una guardia o algo así, notaba que Erick trataba de no abrumarme con términos y cosas, solo me iba explicando, poco a poco y sobre la marcha. Ese fin de semana Sara me invitaba a ir con ellos a la ciudad, pero Giovanna insistía en verme, así que Erick arreglo con Patrick para que me llevara y me trajera de regreso, supuse que lo amenazaba y le daba miles de recomendaciones, porque habla en turco y mi cuñado solo asentía sin decir nada, así que pasamos ese fin de semana separados, él me decía que se quedaba más tranquilo que estuviera con Gio, no le gustaba que estuviese sola, y la verdad, yo la pasaba muy bien con mis suegros, Harry y Nancy.

Viernes por la tarde, esta vez Erick dijo que regresaría un poco más tarde, al igual que Max y Steve, los demás se quedaban hasta el día siguiente, habían estado todos más ocupados de lo normal, pero yo no preguntaba más que lo que Erick me decía, es que la mayoría de las veces llegaba muy cansado, otras veces algo golpeado, según él solo por el entrenamiento... A veces me enviaba un mensaje para que saliera a mirar el cielo, y minutos después veía algún avión pasar... amaba cuando hacía eso, era su manera de mostrarme que hacía o donde estaba.

- Lo admito, Patrick está de buen humor, salvo el cansancio, está más relajado que en la empresa... -

Mi hermana lo decía hasta molesta, porque rodaba sus ojos y las demás reímos de su expresión.

- ¡Adam no está relajado, está feliz! ¡Odio eso! ¡Ni hablar de los niños, sacarlos de aquí será una tortura! No puedo creer estar aquí otra vez... aunque estaba vez es mejor, están ustedes, Adam no está desplegado, y aunque a veces regresa destruido, al día siguiente se despierta sonriendo-

Estábamos merendando en casa, Michelle se confesaba y encogía sus hombros, Celina y Eve nos servían pastel de chocolate, yo iba por té para Eve y para mí y las demás tomaban café.

- Sean sinceras; ¿hay alguno de ellos que la esté pasando mal? Nooo! Hasta parece que se estuvieran divirtiendo -

Eve nos hacía reír porque tomaba asiento y se metía un trozo de pastel gigante en la boca para no decir nada más

- Erick está bien, ósea lo noto más tranquilo, y eso me hizo pensar. ¿Qué tanto amamos a estos hombres? Cada uno de ellos dejo esto por nosotras, pero está más que claro que aman esta profesión... jamás me tome el tiempo de preguntarle a Erick que quería, solo lo deje hacer todo para que estuviésemos bien, para cuidarme; ¿Y él? ¿Jamás le pregunté qué quería hacer, ustedes saben que quieren ellos? ¿O al igual que yo, solo aceptaron que ellos dejen todo por nosotras? -

Les pregunté a todas con sinceridad, era algo que venía pensando hace días... Erick amaba volar, solía decir que cuando estaba en el aire, su mente se desconectaba de todo, y solo era el cielo y él, lo había escuchado decirlo un par de veces, incluso cuando lo decía solía sonreír con nostalgia, y ahora lo veía contento, me contaba qué hacía, no específicamente, pero se empeñaba en enseñarme y explicarme leyes de la aerodinámica, que realmente me importaban poco y nada, pero le prestaba atención y fingía entender, aunque seguramente él notaba que no lo hacía.

Percepción O LocuraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora