dazzling ; sunwon

two: blue

Okay, esa semana había sido... extraña para Sunoo.

Y si, con extraño se refería a un omega peliazul de nombre Yang Jungwon, siguiéndole a todas partes como cachorro a su dueño.

Pero lejos de molestarle, a Kim eso solamente lo había sorprendido y con el paso de los días se mostraba ansioso de saber si aquello acabaría, si Jungwon en algún momento dejaría de seguirlo e iría en busca de amigos que si le hablen y no como él que solo dejaba que caminen en silencio, que sin palabras se sentara junto a él a compartir los almuerzos y abría la boca para nada más que decirle un 'gracias' o 'hasta mañana, jungwon', recibiendo un pequeño asentimiento como respuesta.

Sentarse juntos en clase era lo mismo, con la leve diferencia de que el menor en vez de prestar atención como Sunoo a sus clases, se recostaba y dormía como una piedra hasta que alguno de los distintos timbres sonasen.

A penas una semana y ni Sunoo ni nadie comprendía que pasaba con Yang Jungwon, porqué se había adelantado a su curso con notas deslumbrantes si su único estudio era surcar el mundo de los sueños. Eso sumado a su afición por seguir al pelirrosa sin motivo aparente y en silencio en todos los ratos libres.

- No sé ni porqué me agrada...

Murmuró el omega recostado en su esponjosa cama mientras abrazaba su peluche favorito, un pingüinito pokémon llamdo Piplup que su hermana le había regalado para esos días en los que no podía llegar temprano para pasar tiempo con él.

El pingüinito era apresado en sus brazos con una cierta fuerza cada que el pelirrosa se frustraba por darle sentido a las dudas que pasaban por su mente, todas rondando el mismo tema con respecto al omega menor que ahora tenía como compañero.

A los pocos minutos, un foquito imaginario titiló por sobre su cabecita y rápidamente se quitó las tres mantas que traía encima para acercar su computadora portátil, dejando a Piplup reposado en la almohada mientras que trataría de ordenar mejor sus ideas poniéndolas en un texto explícito y no simples palabras y sentimientos sueltos que no lo llevaban a ninguna parte.

"Tengo un compañero, sorprendentemente es nuevo aún para ser el último año y se ha acoplado al curso de una forma inusual.

Los maestros dicen que tiene notas excelentes pero la verdad es que se la pasa durmiendo en todas las clases y jamás he visto que abra algún estuche de lapices ni mucho menos un libro, es más, parece que los mismos solo le sirven de almohadas.

Él es realmente un omega hermoso, desde el primer día que lo vi no podía apartar la vista y tuve la misma sensación en el pecho que cuando veo un idol muy muy guapo.

Creo que lo más bonito que tiene son sus ojos, ¡se parecen a los de un gatito! Pero la mayor parte del tiempo los veo cerrados o solo cuando almorzamos e intento verlo de reojo porque me da vergüenza que note lo mucho que me interesa.

Desde que tuvo ese lindo gesto conmigo, me halagó y besó mi mano a forma de saludo, sentí muchísima intriga y no puedo negar que al llegar a casa era un volcán de emoción por lo que pasó. Por fin tuve una experiencia similar a la un cuento y con un chico que parecía salido de uno. Pero Jungwon no volvió a dirigirme la palabra, él solo va y me sigue todos los recreos, a veces cuida un poco que no choque con algo que no puedo distinguir por mi condición pero no dice nada cuando le agradezco, tampoco cuando saludo o me despido.

Y podré sonar como un rarito, pero en serio extraño la sonrisa de lado tan atractiva que me dió ese primer día, así como su voz y cómo se sintió cuando me tomó de la mano.

Se sintió como cálido, después de mucho tiempo, era un sentimiento que creí completamente olvidado pero el pequeño detalle de haberlo vuelto a sentir con Jungwon fue encantador.

¿Puedo hacer que Jungwon sea mi amigo a estas alturas? Digo, solo tengo que hablarle, capaz si le dedico más de dos palabras al día el tenga más oportunidades de responderme, aunque para ser sincero también me da mucho miedo decir cosas que no debo, ser demasiado honesto o que se me escape una queja espontánea como las que Hye suele escuchar cuando hablo de más y que al día siguiente, Jungwon finalmente ya no se me acerque... No lo sé, creo que eso sería lo peor.

Aunque el lunes toca verlo de nuevo, trataré de ser más valiente, mostraré una mejor sonrisa y me ofreceré a ayudarlo en clases, eso de dormir puede que la larga lo afecte. ¡Ah! Y claro que también podría cocinarle algunas galletas, siempre dicen que a las personas se las conquista por el estómago.

Misión de lo que queda de este mes: hacerme amigo de Yang Jungwon."

Cuando Sunoo terminó de escribir aquello, de nuevo se encontraba sonriendo en grande y con las mejillas levemente sonrojadas de la anticipación de cómo saldría su plan.

Piplup tuvo que volver a estar entre sus brazos mientras que el omega concentraba su emoción en un fuerte abrazo y suspiraba imaginándose los mil y un escenarios en los que Jungwon le decía una frase larga o volvían a tener un contacto amistoso y eso bastaba para que se sienta con aún más ganas de gastar su tiempo en esfuerzos para acercarse al menor.

Después de todo, Jungwon era bueno y a él también parecía agradarle, por lo que todo saldría bien, ¿verdad?

Para quienes no saben de la colaboración entre Enhypen y Pokémon acá dejo unas imágenes de Sunoo con Piplup, son tan bonitos que no me resistí a incluirlo en el ff (｡> . <)

- 🐑.