「 𝑪𝒉𝒂𝒓𝒎𝒊𝒏𝒈 」 || 𝑱𝒂𝒌𝒆𝒉𝒐𝒐𝒏 ⊹

𝟶𝟿. Emoción

Jake

Esto realmente me estaba matando, no puedo verlo a la cara sin que comience a morir de vergüenza y ruborizarme. Estoy seguro de que no puso atención a la mayoría de las palabras que dije sobre el día que estuve enfermo, tal vez simplemente no hice nada de lo que deba arrepentirme, ya lo habría mencionado mientras se ríe de mi de esa manera.

Intento verme con una expresión neutral pero él. . . ¡No está cooperando! Sigue sonriendo con cada cosa que digo aunque lo diga lo más serio que puedo en ese momento.

Volvió a inclinarse hacia mi, lo que me puso los nervios de punta. Lo mire de reojo y seguía con esa estúpida expresión que solo hace que me ponga aún más nervioso de lo que estoy. Volví a tomar una bocada de aire y finalmente decidí hablar de algo.

—¿Cómo estubo tu día hoy?—me temblaba la voz cuando lo pregunté. ¿¡Es encerio, es lo mejor que se me ocurrió preguntar!?

—Bien, gracias por preguntar—se aparto de mi, acomodándose en su asiento. Me gire al notar que ya no estaba tan cerca y lo mire—¿Cómo estuviste tú?—sonrió por milésima vez, pero esta vez logré controlarme un poco sin la necesidad de volver a girarme. Me cruce de brazos y respondí a su pregunta.

—Bien, no hay mucho que decir—mordí mi labio inferior por dentro para controlarme y no salir corriendo, se que no me vería tan patético como ahora.

Sunghoon pregunto otra cosa y respondí lo mejor que pude sin oírme tan cortante, no quería que pensará que odiaba estar hablando con él en ese mismo momento. Comencé a mover mi pierna, inquieto por toda la situación. Probablemente Sunghoon lo noto y como respuesta soltó un chiste para alivianar la tensión. Solté una risa pero no fue porque el chiste diera risa, sino porque era pésimo.

—Encerio fue tu mejor intento de contar un chiste—lo mire con una sonrisa, abrió la boca y se llevó una mano al pecho haciendo como que mi comentario era una bala que realmente lo irio.

—¿Disculpa? Eso es realmente grosero—dijo sarcástico. Ahora fue el quien volteo la cara y se cruzó de brazos fingiendo estar enojado conmigo.

—Es que realmente fue malo, prefiero decirte la verdad a mentir sobre eso—solté entre risas, extendiendo las palmas de mis manos mientras explicaba.

—Eso no quita que fuiste grosero con la persona que ya te salvó varias veces de apuros—hizo una mueca aún fingiendo estar enojado y sin mirar a mi dirección.

—Oh discúlpame no sabía que eras mi príncipe azul al rescate—volví a reír y esta vez Sunghoon dejo el drama para unirse conmigo. Reíamos por las tonterías que tirabamos como defensa para ver quién era el que realmente tenía la razón. Ninguno de los dos se rendía tan fácil provocando que rieramos aún más al punto de que mi estómago dolía de tanto reír. Cubrí mi estómago con mi brazo pero no pare de reír hasta que ya me estaba faltando el aire. Al calmarnos un poco nos miramos, de nuevo podía notar ese brillo en sus ojos, sonreía de una manera que me provocaba nerviosismo al no saber como manejarlo.

Después de todo la idea de Jay que consistía en hablar con Sunghoon no era tan mala, me la estaba pasando bien con su compañía. Me hacía sentir bien el hecho de reír a carcajadas con él por tonterías que decíamos. Simplemente me hacía sentir cómodo con su presencia.

—Oigan—una voz llamo nuestra atención y miramos en dirección de dónde provenía. Era la bibliotecaria, no se veia muy feliz—les recuerdo que esto es una biblioteca—dijo cruzada de brazos. Sunghoon y yo nos miramos—la lluvia ya paro así que pueden ir a otro lado— al terminar de decir eso se fue y nos dejó a Sunghoon y a mi solos. Captamos la señal, nos levantamos, recogimos nuestras cosas y pusimos las sillas en orden antes de irnos.

Cuando salimos nos miramos y soltamos una risa nerviosa ante tal regaño de parte de la bibliotecaria. La lluvia ya había parado así que podíamos volver a los dormitorios. Caminamos juntos hablando sobre algunos pequeños gustos del otro. Teníamos una cosas en común y eso me emocionaba, me sentía de una manera tan agradable al estar hablando con él, ya no me sentía tan nervioso como al principio y eso me tranquilizaba. Sin darnos cuenta ya habíamos llegado a los dormitorios, ahora es cuando nos separamos, generando un sentimiento de vacío en mi. Era triste el hecho de que ese increíble momento había llegado a su fin. Hice una mueca al despedirme y girarme para abrir la puerta de mi dormitorio.

—Oye—volte a ver a Sunghoon con entusiasmo al oírlo—hay que volver a salir algún día—sonrió, mirándome ansioso por una respuesta. Al escuchar sus palabras me emocioné internamente al imaginar otro día junto a él. Asentí con una sonrisa en la cara y entramos a nuestros respectivos dormitorios. Me apoyé a la puerta cuando la cerré y sonreí como idiota.

Finalmente agite mi cabeza y me concentre en dejar mis cosas. Me paralice al ver a Heeseung en su cama mirándome perplejo. Había olvidado por completo que Hee estaba en el dormitorio, aclare mi garganta y dejé mis cosas en mi escritorio.

—¿Tuviste una linda tarde?—dijo alzando una ceja y riendo burlonamente al presenciar esa escena de mí.

—Sí. . . estuvo bien—dije sin interés intentando no llamar mucho la atención.

—¿Bien?—soltó una risa—parece que la pasaste de maravilla.—Ignore el comentario y entre al baño para escapar de las demás preguntas que estaba por decir.

Sí, era obvio que la había pasado de maravilla.

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