kilig ✧ knowmin

capítulo viii.

Advertencias: Omegaverse, parejas secundarias, historia cliché, drama y angst

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Minho estaba subiendo por las escaleras lentamente cuando Felix comenzó a bajarlas, llevando en brazos a un dormido Seungmin, junto con un bolso donde echó ropa junto con algunos juguetes que lo mantuvieran entretenido esos días en los que se quedaría con él.

—¿Fuiste a ver a Seungmin? —le preguntó Minho con la voz ansiosa.

Felix suspiró, negando con la cabeza.

—Prefiero no acercarme, sus feromonas son algo fuertes —dijo el beta intranquilo, antes de seguir bajando—. Minho, no te preocupes por Seungmin, yo me encargaré de todo. Tú sólo... disfruten estos días, ¿está bien?

El alfa asintió con expresión ausente, sin voltearse para ver a Felix salir de la casa con paso presuroso. Si hubiera tenido un oído normal, sólo habría escuchado el silencio, pero al ser alfa, pudo percibir los jadeos bajos viniendo de su habitación.

Terminó de subir la escalera, caminando lentamente hacia el cuarto, y antes de entrar, inhaló profundamente.

Un dulce, atrapante y agradable olor lo envolvió por completo.

Un perfume que conocía muy bien, porque era el olor que solía emanar Seungmin cuando se acurrucaba a su lado para ser mimado, sólo que ahora era mucho más fuerte, más atrayente e intenso.

Abrió la puerta de golpe, encontrándose con una agradable vista que lo excitó enseguida. Seungmin acurrucado, abrazando su almohada, murmurando el nombre de Minho en voz baja, vistiendo... ¿acaso era su camisa esa?

Debía serla, porque le quedaba un poco apretada y pequeña, pero se le veía hermosa a más no poder.

Al escuchar la puerta abrirse, Seungmin se volteó, su rostro ruborizado por completo.

—A... Alfa... —susurró Seungmin, con la voz llena de esperanza.

Minho dio unos pasos, y el omega, de forma automática, soltó la almohada. Se puso en cuatro de forma torpe, dejando a la vista su pequeño y apretado ano lubricado.

La polla del alfa dio un respingo ante la visión tan excitante que tenía.

Sin embargo, como en un sueño, recordó las palabras de Jihoon.

Haz que su parte racional conecte con su parte omega, así de simple.

Minho no quería sólo llegar y follarlo. No quería que todo se redujera a un plan netamente sexual, donde Seungmin sólo estuviera disfrutándolo porque estaba en su celo, mientras su parte racional estaba desconectado de ello. Minho quería que Seungmin también lo disfrutara, lo guiara, le dijera si le gustaba o no.

Con lentitud, llevó un dedo a la espalda de Seungmin, delineando su espina dorsal hacia abajo, sintiéndolo temblar bajo su toque.

—Alfa... Alfa, por favor... —sollozó Seungmin, moviendo sus caderas.

Minho se inclinó, subiéndose a la cama, llevando sus labios hacia el cuello del omega, comenzando a dar pequeños y cortos besos sobre su piel. Seungmin gimoteó, confundido, levantando la vista, y Minho lo aprovechó para darle un beso en los labios, profundo, sincero, lleno de cariño y ternura.

Seungmin se volteó, recostándose de espaldas sobre la cama, por lo que Minho se subió sobre su cuerpo, llevando una mano hacia la cintura de Seungmin y la otra a su rostro.

Se alejó unos centímetros, humedeciendo sus labios.

—Voy a hacerte el amor, Kim Seungmin —le murmuró Minho, acariciándole la mejilla—. ¿Entendido?