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han pasado dos semanas donde Sergio se había puesto más violento que antes, le prohibió a Özil ir a la escuela una semana entera, solo podía ir una o dos veces.

desde que se negó a hacerle caso a Ramos la última vez, las violaciones duraban más, el encierro se volvía eterno.
tampoco tenía teléfono, el español en un ataque de furia se lo rompió, no podía comunicarse.

ya no lo amaba a Sergio, estaba con él por miedo, tenía tanto miedo de lo que pudiera hacerle.. Al fin lo aceptaba.

Mesut no aguantaba más, estaba tan deprimido y sus pensamientos no eran de mucha ayuda.

veía siempre la tijera, pensaba en cortarse las venas y acabar con esta vida de mierda que tenía.. Pero por terror no lo hacía.

vio el cielo a través de la ventana, la cual estaba cerrada con seguro, ya se torno oscuro.

pronto sería hora de comer.

vio el reloj de la pared, a nada de marcar las 9:00 p.m.

marcada la hora, Sergio entró a la habitación con un plato de comida.

- hola, ¿te entretiene mirar la nada o que? -pregunto dejando el plato en la cama-

- no.. Solo imagino cosas.

- ¿que imaginas?

"que nunca te conocí"
pensó pero no lo dijo, podría morir si llegará a decírselo.

- no lo se.

- vale, anda, come así después dormimos.

"dormimos"

ese "dormimos" suyo es solo otra palabra para decir "cogemos".

pensaba en sus padres, ¿ellos pensaran en buscarlo? ¿siquiera les importa que él lleve días sin ir para casa? Esperaba y rezaba para que lo ayuden.

no tenía hambre pero el mayor se enojara si no come nada, así que se apuro para hacerlo.

le ha traído tenedor y cuchillo.. El estuvo viéndolo durante un largo rato mientras comía, viendo su filo.

quizás pensarán que esta loco, pero quiere poner fin a todo este infierno.

°

- Mesut, ¿ya comiste? -el rubio se asomo, vio la cama vacía, solamente estaba el plato vacío con un cubierto- ...

se adentro a la habitación buscándolo con la mirada, pero no vio atrás suyo.

- ¿Mesut? -pregunto-

se quedó en silencio muy pocos segundos ya que después soltó un corto pero fuerte grito al sentir como clavaban algo en su espalda.

ese era el cubierto que faltaba.

cayo al suelo de cara, quejándose. Pero lo había visto.

- pedazo de mierda, eres listillo, ¿eh? -pregunto tirado en suelo cuando vio a su novio temblando- ¿como.. Como te atreves, puta de mierda?

el alemán no dijo nada, se quedó sorprendido por lo que había hecho y se paralizó frente de él unos segundos.

pero pudo reaccionar y correr. Fue hacía la puerta, estaba cerrada con llave.

busco y busco y busco las llaves, aquí no, allá tampoco, por allí menos.

no las pudo encontrar, quiso salir por la puerta trasera pero también estaba con llave, se estaba desesperando.

las ventanas de la casa de Sergio tenían barrotes de metal, era como una cárcel.

en un momento de desesperación empezó a patear la puerta, no podía abrirla.

su llanto aumentaba cuando oía los pasos de alguien acercándose. Pateaba con más fuerza pero le era imposible abrir.

- amor.

se quedó paralizado, volteo lentamente y con todo el miedo del mundo.
allí estaba, por su cara no parecía sentir algún tipo de emoción. Estaba con el cuchillo en la mano.

- ¿sabes? De pequeño, mis padres siempre me decían que yo nunca tenía que dejar que otros sean superiores a mi. Yo tenía que ser mejor y más fuerte que los demás.

Mesut no respondió, estaba completamente quieto, ¿correr por toda la casa? No tendría sentido.
¿gritar por ayuda? Lo mataría.

no sabía que hacer.

- no pensé que eras capaz de esto, pensé que solo eras una puta asustadiza, me sorprendiste mucho, Mesut. No eres tan cobarde como creía -¿realmente pensaba eso de él?- pero me hiciste sentir un estúpido recién, como alguien inferior.

en un abrir y cerrar de ojos, Sergio estaba a pocos centímetros del rostro de su amado novio.

- amor, ahora me curaras lo que hiciste, ¿si? Si no quieres que este cuchillo te lo meta en el culo y te haga sufrir de la peor manera posible.. Yo no digo que soy capaz de hacer, yo lo hago, creo que lo sabes, ¿no?

el alemán sintió muchos escalofríos, estaba temblando.. Pero si no quería que fuera peor, asintió.

IgualDonde viven las historias. Descúbrelo ahora