Mi Primer Y Único Amor ❤️💜

Capítulo 85

Transcurrieron dos semanas más, solo faltaba unos días para que César regresara, y nosotros ya estábamos terminando con el vídeo musical.
Mi comunicación con César era bipolar, en ocasiones me trataba bien, como si nada y después, cuando supongo que recordaba que trabajo con Cornelio, se ponía insoportable, estaba aprendiendo a que no me afectaran sus palabras, ya que en ocasiones era muy cruel. Sin duda no era el César del que me había enamorado, con el que me había casado y el que me había jurado amor eterno frente al altar.

Estábamos en el set de grabación, debido a la conviviencia que teníamos casi a diario, mi amistad con Cornelio y con Luis crecía.
Me encontraba viendo las escenas faltantes por grabar, ya eran pocas pero Cornelio se la pasaba riéndose porque le daba pena, por lo que era difícil tener buenas tomas.

-ya comportate- le dije riendo mientras él bebía un poco de agua

-no manches como me voy a poner acá bien prendido con la plebe- señaló con los ojos a la modelo -que tal que me enamoro- dijo bromeando

-por eso te dejo Leila- le pegue en el hombro

-fue un golpe bajo- entrecerro los ojos y yo reí -ya pues, vamos a grabar que ya tengo hambre-

-pues ya ponte serio- le dije y ambos reímos.

Regresé con el director de camara y le indique que ya estaban listos para grabar.
Las escenas salieron en cuatro tomas cada una, ya que se reía Cornelio, o la modelo o Luis, pero no dejaba de ser divertido.
Una vez que terminamos la última escena todos festejamos, tomamos algunas fotos en grupo y demás.

-vamos a festejar tn- me dijo Luis

-sabes que no puedo- dije mientras guardaba mis cosas en mi bolsa

-un rato- insistió

-no iremos a ningún lugar donde no puedan estar los mellizos- dijo Cornelio -iremos a un restaurante-

-tu más que nadie sabe que César no lo vería bien- dije parandome frente a ellos

-pero va Nico- dijo Cornelio -puedes decirle que el fue quien te invito-

Por una parte no quería mentirle a César, de por si me hacía sentir que ya estaba haciendo algo malo, pero por otra parte era algo que necesitaba, y traería a mis mellizos conmigo, no lo veía mal.

-de acuerdo- rodé los ojos -solo un rato- ellos celebraron y yo solo me reí

Salimos de la locación, inmediatamente fui a buscar a mis mellizos, estaban con sus niñeras.

-todo bien?- pregunté cargando a Alain

-todo bien señorita- me dijo Pamela

-ya les dije que me llamen tn- sonreí y ellas me correspondieron -bueno, me pueden ayudar a llevar las cosas de los mellizos?- ellas asintieron

Fuimos al carro y acomodé a Alain mientras Liz acomodaba a Alana y Pamela metía las maletas a la cajuela.

-muchas gracias chicas- les dije

-por nada tn- me sonrió Liz

Me despedí de ellas y me subí al auto, di un salto al ver a Cornelio aparecer de pronto y recargarse en la ventana.

-te voy a poner un cascabel cabron- le dije riendo

-oh pues, no es mi culpa que tengas la conciencia sucia- rió y yo le di un sape -bueno ya, solo quería decirte que sigas a Luis, yo me voy detrás de ti, el restaurante ésta a unos cinco minutos de aquí-

-de acuerdo- sonreí

-como van los mellizos?- preguntó intentando verlos

-bien, tranquilos-

-vale, vamonos pues- dijo y asenti

Encendí el carro y el primero en salir fue Luis, enseguida me enfile yo y detrás Cornelio. Efectivamente, el trayecto fue de unos cinco minutos. Al llegar me estacione a un lado del auto de Luis, y del otro lado se estacionó Cornelio, en la entrada del restaurante estaba Nico con otros compañeros y compañeras de trabajo. Me apresure a bajar a Alain.

-te ayudo con Alana?- me preguntó Cornelio y yo solo lo mire

-mejor yo la llevo- dijo Luis y yo asenti

Entramos al restaurante y nos sentamos.

-me puedes permitir dos sillas para los bebés porfavor- le pidió Cornelio a la mesera y ella asintió, las trajo -gracias-

Acomode a Alana a mi derecha y enseguida de ella estaba Cornelio, a mi izquierda acomode a Alain y enseguida de él estaba Nico.

-pues vamos a brindar- dijo Nico y comenzaron a servir vino en las copas, yo preferí tomar refresco debido a que venía manejando y traía a mis niños en el auto -salud porque este proyecto está por ver la luz-

-salud por la persona que hizo realidad todas nuestras ideas- dijo Cornelio mirándome

-sin duda sin ti ésto no hubiese sido lo que es hoy- dijo Luis y yo sonreí

-gracias chicos, gracias Nico por darme esta oportunidad- estaba muy conmovida

-y creeme que no será la última- me sonrió -salud-

-salud- dijimos al unisono y bebimos un sorbo

-bueno pues vamos a comer- dijo Nico y todos asentimos, había un gran banquete al centro de la mesa

Todos nos servimos en nuestros platos, pasó un buen rato, mientras los mellizos se entretenían con un poco de pan suave que mordian y su chupete, pero Alana comenzó a estar inquieta.

-voy por los biberones de los mellizos- dije poniéndome de pie

-te acompaño- dijo Cornelio y yo solo asenti

Salimos del restaurante y fuimos directo al estacionamiento, no decíamos nada, y esque no había nada que decir, simplemente íbamos por los biberones. Me entretuve en la cajuela preparando los biberones cuando de repente escuché....

-no mames César no!- era la voz de Carlos, enseguida escuché un golpe en seco

Cuando mire Cornelio estaba en el piso con su labio sangrando y César me veía con unos ojos de enojo, unos ojos que nunca había visto y que realmente me daban miedo.

-que te pasa?- le pregunté mientras ayudaba a Cornelio a levantarse -no llegaban en tres días?-

-y por eso te vienes a comer con éste pendejo?- dijo César señalando a Cornelio que solo tenía la mano en su labio

-Cesar cálmate cabron- le dijo Carlos

-no vengo solo con el para tu información- lo mire -vengo con todos los involucrados en el proyecto-

-y mis hijos?- me preguntó ignorando lo que le dije

-voy por ellos- dije y empuje a Cornelio para que caminara frente a mi y no dejarlo con César

Entramos al restaurante y todos nos miraron confundidos

-que pasó?- preguntó Luis

-nada, todo bien- mintió Cornelio y yo solo lo mire como disculpándome

Me disculpé con todos por tener que irme tan pronto, y me despedí, tome con cuidado a Alana y Nico me ayudó con Alain, salimos del restaurante y César estaba recargado en su carro mientras Carlos hablaba por teléfono. ¿Porqué César estaba reaccionando así?

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