My Fucking Sugar [Michael x Franklin] [GTA V]

Sin escapatoria

<Michael>

-¿Competencia? ¿De qué mierda hablas?... ¿Piensas que todo en esta puta vida es ver quien gana para sentirte grandioso?... que patético eres al pensar que engañar a tu pareja, entra en ese rango.

Por tan increíble que pareciera, Trevor no respondió en esta ocasión; muy al contrario de lo que podía pensar de su reacción. Se puso de pie, aburrido de mis negativas y tan pronto como llegó, se fue, dejándome con un amargo sabor de boca al no saber si fue lo que esperaba o quería; sin embargo, decidí no molestarle para evitar peleas estúpidas y me quedé otro momento mirando al cielo.

No pasó mucho cuando escuché risas del otro lado del patio, parecía que Trevor había ido detrás de Patricia al no recibir lo que tanto quería de mí. Sólo escuchaba como estos dos la pasaban tan bien, que incluso los llevó a subirse en la camioneta para irse mientras Philips me dedicaba una sonrisa burlona -Maldito hijo de puta-

Aproveché la soledad en la caravana para ir a la cocina por algo de cenar que no estuviese con moho o algo naciendo de sus ingredientes. Una vez que encontré una pasta y la calenté, me fui hasta el sillón para cenar acompañado de una cerveza.

En este momento no me encuentro disponible, pero deja un mensaje y en cuanto pueda te devuelvo la llamada.

Era realmente extraño que Franklin no atendiera el teléfono y de alguna forma me hacía eco en la cabeza. ¿Que tal si Madrazo decidió desquitarse con él? ¿Habría necesidad de ir hasta Los Santos a echar un vistazo?... Así corrieron los minutos, por momentos volteaba a ver el reloj por la repentina presión que cayó sobre mí y el estar solo lo empeoraba más.

-Tranquilizate Michael... todo estará bien ¿no?... Franklin es un chico inteligente y no está solo, tiene a sus amigos del barrio.

Con ese pensamiento solté un suspiro y por fin logré controlar mis ansias de correr tras él. Tallé mi rostro al sentirme aliviado y pasé al baño para asearme antes de irme directo a la cama, dejando de sobrepensar las cosas.

-Esa cena estuvo maravillosa Trevor, realmente me la pasé muy a gusto con tu compañía.

-"Gusto el que me trajo tu aceptación a esta noche tan extraordinaria... descansa Paty"- asomé la cabeza por el umbral de la habitación para encontrarme con la escena de Patricia besando la mejilla de Trevor y este devolviendolo sobre su frente para luego cada quien tomar un rumbo diferente. Volví a mi posición de mirar perdido el televisor roto mientras repasaba todo lo que acababa de presenciar, no era nada de que alarmarse, ese pendejo haría de todo para ponerme de rodillas ante él; pero era algo que nunca volvería a realizar -"Buenas noches Michael"-

Ni siquiera me animé a responder, me sentía bastante extraño en realidad y no entendía el porqué -"Oh ya veo, la florecita delicada sigue molesta... como quieras"- le miré de reojo con molestia y a punto de responder con el mismo veneno; no obstante, no le dí ese placer.

-Descansa Trevor.

Después de eso no supe más pues me acosté por fin y pronto el sueño me salvó de esa situación tan incomoda. Aún así, esto no fue la gota que derramó el vaso, pues a eso de las 3 de la madrugada unos extraños ruidos se escucharon desde la sala improvisada, abrí los ojos con cansancio y busqué con la mano a Trevor para despertarlo por si se había metido un ladrón; pero al no encontrarlo, decidí tomar valor y asomarme por mi cuenta -Maldita sea ¡Eres un maldito asqueroso!-

Me arrepentí de inmediato al tomar esa decisión, regresando de inmediato a la cama en lo que los otros dos se apresuraban a ponerse de pie y vestirse con vergüenza, o al menos eso pensaba de Patricia, porque sabía que Trevor lo hacía con placer y a propósito para ser descubierto -Lamento mucho esta situación joven Michael...-