La carta (revisado)

338 38 1
                                    

Después de haber tenido esa horrible pesadilla (como todas las demás noches), Wukong no podía dormir, simplemente no podía.
Estaba demasiado alterado como para volver a tratar de conciliar el sueño.

Wukong se paró de la cama de mal humor, se dirigía a la Sala.

Cuando de pronto oyó un crujido y sintió algo entre sus pies descalzos, Wukong volteó hacía abajo y vió un pequeño papel, por curiosidad lo abrió, dando a descubrir una carta, más específicamente, un poema para Macaque, un poema que nunca le pudo entregar.—

— Wukong se sorprendió,
pero mas no se resignó y comenzó a leerlo...—

“Macaque, te quiero, te quiero mucho,
pero.. Lamentablemente mi amor no es de tipo fraternal.. Quisiera que realmente lo fuera, pero.. Ya no puedo seguir ocultando mis sentimientos por ti.
Me has gustado desde hace mucho tiempo. Poco después de que nos conociéramos, mi corazón empezaba a latir muy rápido y me ponía muy nervioso cada vez que te veía, pensaba todo el tiempo en ti, aparecías en mis sueños, quería verte todo el tiempo, sentía mucha calidez cerca de ti, mi mundo eras tú.
Y ahí me dí cuenta que... estaba enamorado de ti.
Me gustaba cada cosa de ti, tus orejas, tu naríz, tu pelaje blanco bañado a la luz de la luna, tu marca roja que cubría tus ojos y la mitad de tu cara, tu sonrisa, tu risa, tus ojos color miel, tus manos, tus cicatrices, tus cartas, tu personalidad fría pero a la vez cariñosa y cálida.
Me encantaba todo de ti, incluso lo que tú considerabas "defectos", yo solo lo veía como una cosa más que amar de ti, te amo Macaque, siempre lo he hecho.
Te amé en el pasado, te amo en el presente, y prometo que te amaré en el futuro.”

Atentamente:
Wukong’

De pronto empezaron a brotar pequeñas lágrimas que se dirijían hacía las mejillas de Wukong.
Sentía una gran tristeza y un gran arrepentimiento por no haberle entregado la carta a Macaque.

Wukong recordó que ese día tenían planeado derrocar al Emperador de Jade, y para celebrarlo quería entregarle la carta, pero sentía demasiados nervios, además..
Tenía miedo de que Macaque no sintiera lo mismo por él.
Así que se resignó y no le entregó la carta.

Tal vez ese había sido su peor error.. El no haberle entregado la carta..
Tal vez si se la hubiera entregado y Macaque correspondía a sus sentimientos, tal vez si hubiera detenido a Macaque, tal vez si distraía a sus hermanos para poder entregarle la carta, tal vez si no hubiera tenido esa idea, tal vez si no hubieran hecho esa reunión, tal vez si no se lo hubiera comentado a sus hermanos..
Tal vez..
Tal vez así todavía tendría a su Macaque..

Wukong se arrepentía cada maldito segundo, cada maldito minuto, cada maldita hora, cada maldito día, cada maldito mes y cada maldito año..

Wukong siempre se arrepentía de haber matado, y alejado en el proceso, a su Luna, su otra mitad..

Quería morir..
Realmente quería morir, no podía vivir sabiendo que mató a su amante de una manera tan malditamente fría y despiada.. Y que nisiquiera cuando Macaque le suplicaba se detuvo siquiera a repensar si lo que hacía estaba bien..
Odiaba todo, pero se odiaba más a sí mismo.

Wukong empezó a tener un flashback, y, en el proceso, se desmayó —


Era un día normal como cualquier otro, Wukong no podía recordar bien, solo sabía que lo habían mandado a eliminar a un demonio..
O algo así..

Wukong llegó al lugar, pero no contaba con que se iba a encontrar con su pareja y amigo... Macaque.

Wukong en cuanto lo vió, supo que no iba a hacerlo, no podía cumplir el trabajo. Después de todo.. Él era su pareja..
Pero como dije antes, "era"

Wukong solo sintió una punzada en la cabeza, y de repente todo se nubló.

Wukong reaccionó y atacó a Macaque sin contenerse, Wukong lo tomó desprevenido,
asi que no estaba en la mejor posición que digamos.

Los dos monos comenzaron a pelear,
Macaque empujó a Wukong a la tierra, reteniéndolo con sus sombras, aunque eso no le sirvió de mucho, ya que Wukong se deshizo fácilmente de ellas, y comenzó a atacar a Macaque una vez más.
Wukong no se contenía en cada uno de sus movimientos, al igual que Macaque, apenas y podían seguir el ritmo del otro.
Tenían una perfecta sincronización, y esa era una gran ventaja cuando luchaban contra enemigos, pero no contra ellos mismos,
ya que ninguno de los dos hubiera pensado que algún día pelearían el uno contra el otro.

Macaque y Wukong seguían encestando golpes el uno al otro, ninguno se estaba conteniendo,
Macaque dejaba en el suelo a Wukong, y este se volvía a levantar contra él,
Wukong empujaba a Macaque hacía la tierra, y este se volvía a levantar.
Esta fácilmente podría ser una pelea sin fin alguno.

Pero como todos ya sabemos..
No fue así.

Después de ese recuerdo, Wukong solamente podía pensar en donde estaría su Luna ahora.

Wukong sentía una presión en su pecho y una gran tristeza, quería llorar.. llorar y nunca parar, buscaba consuelo.. Alguien que lo pudiera consolar y hacerle saber que todo estaba bien..
Pero.. Ya no tenía a la persona que hacía eso..
La extrañaba.. Lo extrañaba.. Extrañaba demasiado a Macaque, lo extrañaba tanto.. aunque no lo admitiera.. él lo hacía.. —ㅤ


·
·
· 

ㅤㅤㅤㅤㅤ|  11:13 p.m.  |

·
·
·

¡Hola! Soy Mateo, Taiyō, Akito
¡o como sea que quieras llamarme!
Lamento la demora en este capítulo, pero últimamente no me he sentido bien, además de no tener inspiración..
Sé que dije que probablemente este capítulo iba a ser un poco más largo, pero como dije anteriormente, no me he sentido bien.. Realmente espero que hayan disfrutado este capítulo.
¡Oh! Y antes de que se me olvide, creo que sé cada cuanto actualizaré, actualizaré aproximadamente una vez por 1 o 2 semanas, ya que dentro de poco entraré al colegio, y.. tendré que centrarme en eso..
Así que.. ¡Eso es todo! ¡Les veré en el próximo capítulo! ¡¡Bye!!

Los susurros de la LunaWhere stories live. Discover now