¿A donde irás?

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Pov Sara(tn): Salí de la habitación, sin dar oportunidad a Lestat de responderme.

No sabía cómo lidiar con todo esto, no podía.

¿En que clase de persona me convertiría perdonarlo?

No quería que nada le pasará a Lestat,  pero tampoco era capaz de quedarme y vivir atormentada con todas las vidas que ha arrebatado.

¿Que me hace a mí distinta de ellos?
¿Y si cuando nos conocimos también pensaba alimentarse de mi?

¿Y si no soy la primera chica con la que juega?
Porque igual todo esto no ha sido más que eso, un juego.

Pero el me ama, ¿Verdad?

Agarre la primera maleta que encontré y me di cuenta de que no tenía nada que empaquetar, no había nada que me atara a esta casa.

Me dirigí a la puerta lo más rápido que pude, pero el llegó antes, se puso delante de esta impidiendo me el paso.

Sabía que no me haría daño, que simplemente no quería que me fuera.

Lestat:- ¿Lo sabes o lo crees?

Sara:- ¿Como sabes tú eso? ¿También lees mentes?

Lestat:- Es uno de mis dones.

Sara:- ¿Cuanto tiempo llevas metiéndote en mi cabeza?

Lestat:- Nunca lo hice aposta.

Sara:- ¿Alguna vez vas a responder a las cosas que te pregunto?

Lestat:- Se que no te puedo impedir irte, pero necesito saberlo, ¿Dónde irás?

Sara:- Tengo a donde ir, si es lo que te preocupa.

Lestat:- Dime qué no vas a volver con tu padre. Tu no te viste el día que te rescaté.

Sara:- No Lestat, yo lo sentí. Y no es asunto tuyo a dónde vaya.

Lestat:- No quiero que te pase nada, con tener eso por seguro me conformo.

Sara: Prométeme que no me seguirías, que no leerás mi mente, que no aparecerás de repente en mi vida.

Lestat:- Si tú me prometes que no volverás a caer en los brazos de la muerte, porque no podré ir a rescatarte si no voy a saber que será de ti.

Me acerqué a él y le besé, un beso en forma de promesa y que sabía a despedida.
Con mis manos en sus mejillas, dude en quedarme, en seguir a su lado, pero necesitaba salir de aquí, aclarar todo esto. Si no la culpa se convertiría en resentimiento y nos acabaría odiando a los dos.

El tenía sus manos a la altura de mi cintura, pero a escasos centímetros, como si no se atreviera a tocarme.

Me abraze a su torso y solo entonces sentí sus brazos a mi alrededor, solo entonces sentí como le hubiera gustado retenerme y probablemente fuera más que capaz de hacerlo.

Nos separamos y se apartó de la puerta.
Y ante mi sorpresa, la abrió para que pasará.

Salí con una dirección en mente, solo tenía un lugar a donde ir.

Sabia que la pondría en aprietos, pero no tenía otra opción, después de semanas sin vernos, sabía que Satine me acogería.

Aunque eso le trajera problemas.



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⏰ Última actualización: Jul 29, 2023 ⏰

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La chica que me devolvió la vida. (Lestat y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora