Hunger [Bakugou]

4

Capítulo cuatro; Festival de deportes

a veces,

lo mas dificil de llevar

es nuestra propia piel.

Después de esa primera vez, estudiar con Kirishima se convirtió en parte de la rutina de Bakugou.

Bakugou descubrió que había ventajas y desventajas en tener un amigo.

La ventaja abrumadora era, por supuesto, que Bakugou no sentía que se ahogaba constantemente en silencio, solo, mientras que a los demás simplemente no les importaba.

Kirishima lo hizo sentir como… en realidad podría ser extrañado si sucumbía a las olas que seguían tratando de arrastrarlo hacia abajo.

Su presencia ayudó a darle a Bakugou la fuerza para seguir a flote.

Era agradable no estar solo todo el tiempo nunca más.

Sin embargo, una estafa casi igual de abrumadora era que ahora que Kirishima pasaba tiempo con él durante el día escolar, se volvió mucho más difícil ocultar su... problema.

De hecho, tenía que comer una comida completa, ahora, bajo la mirada preocupada de Kirishima, en lugar del mínimo necesario para seguir adelante.

Y debido a que Kirishima disfrutaba de su presencia, por alguna razón, Bakugou tampoco tuvo la oportunidad de escabullirse al baño después del almuerzo para... deshacerse de lo que había comido antes de que su cuerpo desesperado lo digiriera.

Sospechaba que Kirishima podría tener alguna idea de cuál era el problema.

Incluso el exterior espinoso de Bakugou no podía explicar por completo su renuencia a comer cualquier cosa con los ojos de Kirishima en él, la forma en que anotaba lo que comía en su pequeño cuaderno y calculaba sus calorías.

Nunca antes había tenido amigos, por lo que nunca había tenido a nadie a quien le importara su actitud hacia la comida.

Pero a Kirishima le importaba.

Lo vigilaba hasta que terminaba toda la comida de su plato, no se apartaba de su lado hasta que volvían a clase.

Puso ansioso a Bakugou. Más de lo que le gustaría admitir.

No creía que pudiera manejarlo si alguien lo confrontaba por su comportamiento.