Dark Paradise ⸺ Riverducción #YTH

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NOTA

Esta es la segunda parte de
Yes To Heaven.

Será una historia corta.

Recomiendo leer primero ese fanfic,
para entender este.

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All my friends tell me I should move on.

Samy

Me encontraba en mi cama, me sentía totalmente helada, mi boca estaba tan seca que podría decir que estaba deshidratada, quería gritar pero no tenía las fuerzas en mi cuerpo, quería llorar pero mis pensamientos no me dejaban, solo me mantenía en silencio mientras acariciaba la pequeña caja entre mis manos.

Saqué el anillo para observarlo nuevamente y miles de recuerdos aturdieron mi mente, ese era el motivo de la cena, era lo que él había planeado durante días, mi corazón ya estaba totalmente roto, no podría hacerlo más.

—Acepto— Susurré sin fuerzas mientras colocaba el anillo en mi dedo anular—. Nunca me lo quitaré, te voy amar toda la eternidad— Mi voz sonaba quebrada mientras me recostaba lentamente en el colchón.

Cerré los ojos y contemplé el vacío que había al hacerlo, una corriente de aire invadió mi cuerpo por completo mientras que mis lágrimas lograban salir desesperadas nuevamente, sentía culpa por no haberlo detenido, sentía culpa de haber dicho lo que dije.

No podía retroceder el tiempo, ya estaba hecho.

El día de nuestro aniversario, el día que supuestamente se debe celebrar no lo estaba haciendo, mi corazón estaba totalmente roto, había perdido a mi mejor amigo, al amor de su vida.

No podía detener este sentimiento de total culpa, mi pecho dolía de una manera inexplicable, mis huesos dolían al hacer contacto con cualquier cosa a mi alrededor.

Todo daba vueltas, no podía sentirme peor.

Fue ahí cuando un rayo cayó bastante cerca ocasionando un ruido escandaloso sobre la zona, mi mente me jugaba mal cualquier escena de terror que podría imaginarme. Ahogué un grito sobre la almohada al imaginarme tal accidente, sentía como el aire le hacía total falta a mis pulmones.

—¡Samy!— Reconocí inmediatamente su voz. Ari venía rápidamente hacía mí con una taza de té sobre sus manos—. Toma, te hará bien— Me ofreció la taza con cuidado, pero realmente no quería absolutamente nada.

—¡No la quiero!— Aventé la taza dejándola caer al piso—. ¡No quiero nada! ¡Vete de aquí! ¡No quiero a nadie en mi casa, lárgate!

—¡Hey Samy!— Escuché la voz de Roier hacerse presente—. ¡No hagas eso! ¡Por favor, sentimos lo mismo que tú! ¡No lo ha...!

—¡¡No te atrevas a decir que sienten lo mismo!!— Me levanté rápidamente mientras me quemaba con el té que ahora se encontraba en el suelo—. ¡¿Cómo te atreves a decirlo?! ¡Perdí a mi pareja! ¡Ustedes no lo hicieron!

—¡Yo lo conocía mucho antes que tú! ¡Por mí se conocieron! ¡Era mi mejor amigo Samantha, era casi mi hermano!— Quedó helado ante mí—. ¿Qué me vas a decir ante eso? Fuiste su novia, pero no cuentas con el mismo tiempo que yo tenía con él.