Capitulo 14

80 14 0
                                    



Jeno estaba sentado en el césped al lado del lago, fumando, cuando Renjun se acercó a él. Estaba helado afuera, pero nunca lo admitiría o haría un esfuerzo por volver. Quería a Jeno para mantenerlo caliente.

Renjun se sentó a su lado y no dijo nada durante unos minutos, se quedó mirando el agua oscura.

— Te estás congelando — Dijo Jeno y Renjun lo miró.

— Solo un poco.

— Sostén esto.

Renjun tomó el cigarrillo ofrecido y observó a Jeno mientras se quitaba la chaqueta de mezclilla, antes de entregárselo.

— Toma esto.

— Uh... ¿Seguro?

— Sí.

Jeno tomó el cigarrillo mientras Renjun se ponía la chaqueta y se la abrochaba hasta el cuello. Este abrazó sus rodillas contra su pecho y miró a Jeno mientras fumaba.

— Así que... ¿te sientes diferente ahora que tienes veinte? — Intentó hacer conversación.

— La misma vieja mierda, pero una edad diferente.

— Por... ¿por qué no te parece que tu cumpleaños es importante? Deberías estar feliz.

— ¿Feliz de que hace veinte años nací en un hogar abusivo con dos padres que ni siquiera les importaba una mierda? ¿Quieres saber por qué realmente no me preocupo por mi cumpleaños?.

Renjun asintió, inseguro.

— A mí me gustaba mi cumpleaños cuando era pequeño. Mi madre me horneaba un pastel y luego me gustaba desear una torta aún más grande para el próximo año. Pero cuando cumplí diez mi madre no estaba en casa, así que pensé que iba a celebrarlo con mi padre. Bajé las escaleras, obviamente emocionado de que había cumplido diez y había vivido una década. Le dije a mi padre que era mi cumpleaños y que cumplía diez años, obviamente emocionado por ello. Todavía recuerdo la mirada de indiferencia en su rostro cuando se encogió de hombros y dijo: '¿Y qué?'. Es estúpido... pero recuerdo esa mirada en cada uno de mis cumpleaños.

Se detuvo un momento antes de continuar.

— Entonces en mi undécimo cumpleaños ambos lo olvidaron, y en mi duodécimo cumpleaños mi padre dijo que ni siquiera pensara en eso, que sólo querían a mi hermana mayor y que yo había sido un accidente. Estaba bromeando, pero eso se me pegó en la cabeza. Nunca celebraron mi cumpleaños después de eso, nunca me llegó ninguna torta y ni siquiera se molestaron en desearme un feliz cumpleaños. Así que sí, no creo que sea tan importante.

El corazón de Renjun dolió. Literalmente, herido de lo mucho que quería simplemente abrazar a Jeno, acariciarle el pelo y decirle que estaba feliz de que hubiera nacido.

— ¿Sabes que esta casa se llenó solo para celebrar tu cumpleaños? — Preguntó finalmente Renjun y Jeno negó con la cabeza.

— Están aquí por el alcohol. Las personas sólo se preocupan si hay alcohol o drogas.

— Eso no-

— Mira mi madre por ejemplo, ella no da una mierda por mí, porque no ganaría nada de ello. Si yo tuviera un trabajo, me estaría besando el culo. A nadie le importa solo por importar.

— A mí me importa — Dijo Renjun y Jeno se volvió para mirarlo a los ojos.

— Todavía estoy tratando de averiguar
el por qué finges que te importa, porque no quieres que yo le diga a la gente que eres gay — Jeno habló y dio una calada a su cigarrillo.

Renjun ignoró su comentario.

— ¿Por qué siempre esperas lo peor de la gente?

— ¿Por qué no hacerlo?

Bae, I can see the sky in your eyes Where stories live. Discover now