Seis

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El moreno tocó la puerta un par de veces y cómo nadie abría comenzó a jugar con el timbre, un par de segundos después escucho zancadas que se dirigían rápidamente hacia la puerta. Al abrirse la puerta se encontró con un chico pelinegro de la misma altura que el ¿Quien era el y que hacía en casa de Hayashi?

—Que quieres—preguntó el peli negro de mala gana, pues el moreno le había colmado la paciencia.

—¿Está Hayashi?—preguntó apenado. No sabia que alguien más estaría en casa fuera de la chica.

—Todos aquí somos Hayashi—le respondió de mala gana.

—(n.) me refiero a (n.)—dijo rápidamente.

El peli negro abrió los ojos sorprendido, y luego procedió a fruncir el ceño.

—¿Quien eres? ¿Eres su novio?—le interrogo.

—Ah pues yo...—fue interrumpido por el peli negro antes de que terminara de hablar.

—¡Oye (n.)! Tu novio está aquí—se puso a gritar.

El moreno le miró confundido, el chico parecía algo mayor y aún así le resultaba inmaduro.
Pudo apreciar desde afuera cómo la chica caminaba por el pasillo y tenía la cara completamente roja.

—¡Atsu!—le gritó la chica enfadada.

El peli negro quien siempre llevaba una cara seria comenzó a soltar una carcajada.

—Puedes pasar—dijo haciéndose hacia un lado para que el moreno entrara.

Este solo asintió y se abrió un espacio, el chico de nombre Atsu cerró la puerta tras de ellos, la chica tomó a Ryusei del brazo y comenzó a caminar rumbo a su habitación.

—Quiero la puerta abierta (n.)—me grito a la chica.

—Piérdete—le grito ella de vuelta.

Apenas entraron a la habitación la chica cerró la puerta azotandola.

—¿Ese era tu hermano?—pregunto Satou bastante confundido.

—Si, es una verdadera molestia—

—Ya veo—dijo poniéndose la mano en la cabeza, estaba apenado.

Hayashi volvió a sentarse en el piso donde estaba sentada anteriormente, en su pequeña mesita de estudio, Ryusei se sentó al otro extremo de la mesa y dejó sobre ella la bolsa que traía consigo.

—No sabia que tipo de dulces te gustan, así que te traje de todos—

—No tenías que molestarte—le respondió con una sonrisa.

El chico comenzó a sentir cosquillas en el estómago, le gustaba mucho verle sonreír, cosa que rara vez hacía.

—¿Elegiste una película?—

—Si—respondió la chica con entusiasmo. Encendió el televisor con el control remoto, se levantó para poner el DVD y comenzó a reproducir la película.

—Espero te guste—le dijo ella.

Ryusei esperaba que hablaran un poco antes de comenzar a ver la película, así que se sintió un poco decepcionado, cómo no le quedaba de otra comenzó a observar atentamente a la pantalla y de vez en cuando desviaba la mirada para verla a ella, quien no apartaba la mirada del televisor y observaba atenta. Al final de cuentas ella no parecía ser una chica de muchas palabras.

Teen Romance [Ryusei Satou]Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang