🌿Viaje a Everett,

341 47 2
                                    

Al despertar era medio día.
En un Domingo no hay nada de qué avergonzarse, pero yo estaba en casa ajena y esto podría ser interpretado como una falta de respeto.

Me levanté de golpe y corrí al armario para buscar la ropa que Esme me dejó, escogí mi cambio y después de bañarme me vestí con una blusa suelta manga larga con unos jeans negros que por suerte no me quedaban tan ajustados como pensé.

Vi mi teléfono en la mesita de noche y corrí a él para comunicarme con Yejun.

-¿Diga?

-¿Dónde estás?¿Sigues con tus amigos?¿Estás bien?-lo bombardeé con preguntas y lo escuché quejarse.

-Gabs, maldición, tengo una resaca y lo primero que haces es gritarme al oído ¡Oye, espera, puedo ver!

-Si que tomaste, eh-reí ligeramente y me puse a tender la cama.

-Más que eso, me duele todo y acabo de recordar por qué, ugh... Gabs, ven a recogerme, apenas puedo moverme y me gasté todo lo que tenía en este hotel.

-¿Pero y tus amigos?

-Son unos hipócritas, al parecer yo era su bufón, ¿Podrías venir con Rosalie por mí? Se pueden pasear por la ciudad así que no creo que le moleste.

Apreté los labios y negué, no quiero darle más molestias a los Cullen, aunque por otro lado, no puedo dejar a Yejun abandonado en Everett.

-Ella debe tener cosas más importantes que hacer-suspiré recordando lo que ocurrió anoche-Iré por tí, hablaré con Esme para que me ayude con los niños, de lo contrario iré con ellos.

Yejun dijo que esperaría y luego colgó.

Sorbí mi nariz, pensaba en alguna solución con la vista fija en la pared que tocaron la puerta suavemente.

-¿Puedo pasar?-era la voz de Carlisle así que le abrí la puerta. Él estaba con una bandeja de plata con tapa-Veo que estás cambiada, si no es mucha molestia ¿Te gustaría comer en mi despacho?

Asentí y lo seguí.

-¿Dónde están los niños?-me preocupé al no escucharlos, normalmente son muy ruidosos a esta hora.

-Esme y Rosalie se los llevaron a comer Mcdonald's y, Jasper fue al aeropuerto para recoger a Alice-me alegré por la noticia de Alice, ella es encantadora y muy animada, desde el comienzo se mostró amable conmigo y mi familia.

-Espero que los niños no se mal acostumbren a comer papas fritas todos los días-suspiré cuando Carlisle abrió la puerta de su despacho e ingresamos.

-Yo también, pero siendo honestos será difícil con Esme y Rosalie mimandolos-rió ligeramente.

Por mi parte quedé impresionada por lo elegante que es el lugar, hay un sofá largo con una mesita de centro y un sofá personal, también tiene tres cuadros antiguos que llaman mi atención y hay muchos libros en estantes de madera tras su escritorio... Me gusta mucho la mesita con dos sillas que está pegada al escritorio de madera.

Carlisle me ofreció asiento en esa mesita, colocó la bandeja y al retirar la tapa ví: jugo de naranja, yogurt de arándanos con pecanas cortadas, café, panqueques, ensalada de frutas y huevos revueltos con tocino.

-Muchas gracias, se ve muy bien todo, pero para mí sola es demasiado.

Carlisle me regaló una sonrisa.

-No es demasiado, tienes que alimentarte bien en tu estado-lo miré confundida por sus palabras y al parecer se dió-Me refiero... a tu situación, por todo lo que estás viviendo, no debes descuidar tu alimentación.

Inexorable / Rosalie Hale x ReaderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora