Capítulo XXVII: ¿Aclarar las cosas?

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—Estoy bien, estoy... bien— dijo Azura respirando apresuradamente, en cuanto su vista volvió a la normalidad.


Casi sin notar que tenía unos brazos a su alrededor.


—Respira y cálmate primero— escuchó de la voz de Larisa a su lado.


Y ella hizo lo que le indicó.



Levantó un poco la mirada, encontrándose con la expresión asustada de Odalia del otro lado.



—Creo que... olvidé tomar mi medicina— le explicó a Larisa.


—Azura...— regañó ella suavemente.


—Lo siento, es que estaba tan nerviosa... ni siquiera me acordé— dijo ahora sintiéndose capaz de devolver el abrazo —¿me desvanecí? —.


—No, solo fueron sacudidas, duró poco— respondió su amiga.


—¿Puedes anotar la hora a la que pasó?, quizá necesite reportar esto más tarde.


Larisa asintió y separándose del abrazo invocó su pergamino, para anotar la hora.


—¿Esta es tu enfermedad? — preguntó Odalia saliendo del shock.


Ambas chicas la vieron.


—Ha mejorado mi condición con el tiempo. Eran más fuertes y frecuentes cuando era más pequeña— explicó Azura.


Odalia volvió a tomar asiento, pensativa.


—Si existe una mínima posibilidad de que tú llegues a conocer al líder de los rebeldes, entonces quizá pueda darte una imagen de su apariencia— mencionó volviendo a activar la bola de cristal.


—Déjeme ver si entendí. Solo puede ver ciertas partes del futuro que tienen más probabilidad de suceder, pero que incluso no son seguras porque el futuro cambia constantemente, y eso lo hace con ayuda de un fantasma que puede ver entre dimensiones las consecuencias de esas acciones— medio explicó Larisa. 


—Sí. Intentaré hilar decisiones para ver si de alguna forma Azura llega a conocer al líder rebelde. Va a ser difícil porque mientras menos probable sea que algo pase, más borrosa se ve la imagen— le contestó, aunque luego la vio detenidamente, —¿eres su amiga? —.



Azura cruzó una mirada con Larisa, esperando también la respuesta a esa pregunta.



—Si... amigas— respondió quedamente.


Odalia las miró con una ceja alzada, pero ya no dijo más.


Burning Again - LumityDonde viven las historias. Descúbrelo ahora