Una semana más estuve ahí en su hogar de Pony, y por más que quisiera hacer a mi esposa mi mujer, no podia, cierro los ojos y recuerdo su rostro de espanto , hoy me quedaré con mi esposa le digo coquetamente, no me grita Terry aterrada, porque no, la cuestionó hoy hace frío y tus madres saben que soy tu esposo, la hermana María pasa por el pasillo con rostro pícaro y nos dice sin dudar, duérmanse ya muchachos , es tarde y nos cierra la puerta, volteo la miro con una sonrisa ya vez tu madre tiene razon vamos a dormir , la cara de espanto de Candy era digna de una foto sale corriendo tarda un poco pero viene puesta con su pijama yo por mi parte solo me quedo con mi camiseta y en shorts, ven Candy la invito a sentar conmigo a la cama, la beso tímidamente, no te preocupes no haré nada, por respeto a tu madres y tú casa, la invito a meternos a la cama y la abrazo junto a Ami, por lo pronto le digo al oido, te acostumbraras a dormir junto a mi, así que que esos días mis noches sin tocarla y sin hacer nada más allá de lo admisible para mí , le hice el amor a mi esposa, me hizo prometerle que regresaríamos lo más pronto posible , a resolver todos los pendientes, de su trabajo ..
Abro los ojos, y la veo dormida en pecho, vamos rumbo a Nueva York, y mi vida empieza a tomar sentido desde hace mucho tiempo, bajo las escaleras de ese tren,y extiendo la mano a mi esposa, mis recuerdos vuelven a mi, la primera ves que llegue aquí américa saliendo de Inglaterra viniendo de un dolor profundo de alejarme de Candy, lo primero que hice fue tomar un tren a Chicago, quería , necesitaba conocer su casa, su visita en el estreno de Romeo y Julieta y las veces que fui a recuperar a mi mujer, ahora la tengo junto a mi la veo me sonríe en que piensas me pregunta, en ti siempre en ti fue mi respuesta me acerco la beso, sin contar el tiempo y la disfruto a placer mío, y le digo al oido, esto tenía ganas de hacerlo desde el estreno de Romeo a Julieta, bienvenida a Nueva York mi señora grandchester..
Rumbo a la casa de mi madre, noto sus manos nerviosas tranquila que pasa, me dice dudosa es que tengo mucha pena con tu madre, se que no me porte muy bien con ella la última ves que la Vi Terry, cometí muchos errores me dice.
Llegamos a residencia escondída de mi madre, y su recibimiento de mi madre es un gran abrazo ella se sorprende, pero no dice nada, la noto tensa y mi madre también la nota así que la invita a tomar el té en el jardín y sus ojos me indican que las dejé solas así que me retiro excusandome que iré a tomar una ducha, ....pero la curiosidad entra en mi porque se que Candy aún tiene mucho que decir y se que para nuestra felicidad tenemos que aclarar todo.. me acerco y escucho decir...
Señora Eleanor se que usted ah de estar molesta conmigo, la última vez que la Vi, me comporte mal usted me rogó que viera a su hijo y yo que hice me negué y lo único que hice fue a abandonar a mi esposo y le regrese su anillo, no fue por no quererlo, lo amaba más que nunca, pero era ella, fue ella, mi cobardía de mujer, no pude enfrentarla , sus ojos lloran...
Mi madre se acerca la abraza y la consuela, hija Candy, se tú pesar y no te culpo, los chantajes de esa niña, nos engaño a todos, no te voy a decir que no supe cómo interpretar tu actitud, y más cuando me regresaste ese anillo sin ninguna explicación..
Más tarde comprendí todo, cuando recibí la nota del licenciado Michael diciendo que tenía que firmar su acta de matrimonio , supe que se habían casado, pero tuvieron equivocados sus resoluciones ambos, pero no sabes mi alegría al saber que ustedes ya eran marido y mujer..
Contacte a tu padre con George quien fue quien firmó y dió su autorización para tu casamiento, y los dos llegamos a la misma conclusión, eran aún chicos y no supieron manejar la situación, fue tanto su dolor que bloquearon sus mentes admitir que se amaban y eran marido y mujer..
Fue por eso que el señor Albert meses después me presento al doctor Gringberg, y pues ya sabes el resto, discúlpame por intervenir, en sus decisiones pero los dos sufrían y no me puedes decir que no, porque tu padre lo sabía, veo como agacha la cabeza Candy apenada diciendo, cometí un error al decirle a mi mente que olvidará pero mi corazón se moria poco a poco..
Subo corriendo a mi recamats a la vez triste pero feliz se que aún es grande el dolor de Candy pero que también se que está feliz de estar conmigo, tengo toda mi vida para hacerla sonreír...
La invito a mi recamara ella se apena pero veo sus ojos aquel brillo de deseo que se que también quiere estar conmigo, lo que sigue, no podría describir en palabras lo que pasó esa noche mágica en mi alcoba, el amor el vivirlo y el sentirlo no tiene palabras correctas para describirlo, los poetas lo describen con frases dulces al oido y sonetos ,yo diría que desde hoy, me siento diferente, me siento completo como persona, mi corazón late al ritmo de ella, sus pensamientos son los míos, sus ojos son los míos, si ella perdiera algún sentido yo lo perdería, mis pensamientos vuelan y veo a Susana en su silla de ruedas y se que si yo hubiera querido a Susana como amo a Candy su invalidez no me hubiera importado, pero mi corazón hace mucho mucho tiempo estaba ocupado, la veo durmiendo en mis brazos le doy un beso en su cabello de oro diciendo mi muñequita pecosa aún tienes que ser fuerte, falta tu prueba más difícil Susana pero se que serás fuerte y yo estaré ahí para sostenerte... Continuara...
