4 { Ojos Cafés } ♡

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[Tres meses después]

Dalia Miller.

—¿Están listas?

Las cuatro íbamos en el auto de Yessica. Íbamos por la respuesta del examen. Si era un sí en una semana estaríamos volando para España, pero si era un no, aquí nos quedamos.

Esperamos como veinte minutos hasta que pasaron nuestros nombres.

Ya en el auto todas abrimos en sobre en el cual decía si nos aceptaban o no.

El ambiente era nervioso, al destaparlo todas nos demos mirando, luego, cada una miró el papel.

—Aceptada— habló Ivonne.

—X2— suspiro Emma.

—Yo también— Yessica miró a la rubia.

Mis manos temblaban, las ganas de llorar se vinieron a mí, ahí estaba la respuesta.

Las tres me miraron.

—N-

—¿Es neta?

—No puede ser...

Sonreí.

—No- —No podía acabar la frase— N- No-¡Nos vamos!

Todas gritamos. 

El resultado era el que esperaba hace un año.

—¡Esto tenemos que celebrarlo!— Emma estaba emocionada.

—¡Si, digan que sí!— insistió Yessica.

 Iv y yo aceptamos.

[En la noche]

Cuando entramos a la discoteca comenzaba a sonar: Todo de ti - Rauw Alejandro 

—¡Vamos a la barra!— grito la rubia, la música estaba fuerte.

Las cuatro nos dirigimos a la barra para beber algo.

La gente se movía de aquí para allá, unos bailando, otros liandose y otros llegando.

—¡Es que me gusta todo de ti!

Las tres pidieron alcohol, a mi nunca me ha gustado el alcohol, "prefiero un vaso de agua antes que una copa " como hubiera dicho él.

A las tres canciones Emma ya estaba en la pista, bailando: A mí - Rels B

—¿Dalia?— era Carlos.

—¡Carlitos!— lo saludé con un abrazo.

—¿Cómo estás? Me enteré que estabas mal ¿De qué?

Carajo.

¿Dónde estaba Emma? Comencé a buscarla con la vista pero quién sabe dónde estaba metida.

—¿Cómo? ¡Es que no te escucho! Hay mucha bulla— no se me ocurrió otra cosa más que eso.

—¡Yo te oigo perfectamente! 

—Yo no— ¿Que se supone que iba a decirle? 

¿Me dio chorrillo?

¿Estaba vomitando?

¿Llore por un chico?

¿¡Qué iba a decirle!?

—¡Olvidalo entonces! ¿Quieres bailar?

—¡No me gusta bailar! ¡Gracias!— ambos seguíamos gritando por la música "fuerte".

—¡Qué lástima!— respondió mientras bailaba un poco.

Le sonreí incómoda. Carlos era el quedante de Emma, se conocieron en una plaza y desde ahí han estado saliendo pero la rubia no lo quiere para algo formal.

ℱ𝓊ℯ𝓇𝒶 𝒟ℯ ℒ𝓊ℊ𝒶𝓇Donde viven las historias. Descúbrelo ahora