SUEÑOS: Un Mundo Desconocido (Mundo #1)[En Proceso]

Capítulo 29 | ¿Directo a una trampa?

-Vamos Lu- alenté a la chica que no se había separado de mi desde que entramos en esa puerta.

Su mano cálida hacía que la mía se mantuviera igual, algo que sin duda agradecía ya que todo el lugar estaba helado. No estoy seguro de cuánto tiempo llevamos caminando.

Cinco minutos.

Quince.

O tal vez media hora.

Lo cierto es que el flujo del tiempo se vió afectado para mí, acabamos de entrar y siento que tenemos una eternidad acá dentro. Además el reloj que Max me dió se averió, no emite ninguna señal ni marca ningún número ¿Cómo voy a regresar sin este aparato? Además al entrar la puerta tras nosotros desapareció de inmediato.

¿Habrá Sido una buena idea ingresar aquí solo por qué una simple corazonada me empujó a hacerlo?

Todo seguía siendo blanco, aunque nuestra visión ya estaba adaptada al brillo. Lo único visible en este lugar era el camino por el que estábamos.

Solo queda seguir hacia adelante.

-¿Qué es este lugar?- Lu busca respuestas en mí.

-No sé - dije.

La chica freno y provocó que yo igual parara al no despegar su mano de la mía.

-¿Cómo que no sabes? - reprochó.

-Bueno yo...- intenté responder mientras daba un razonamiento lógico en mi cabeza pero una voz robo nuestra atención.

-Hola-

Observamos una pequeña niña, aproximadamente de unos siete u ocho años de edad. Traía un vestido blanco con decoraciones en un verde pastel, su cabello lo llevaba con una trenza justo hasta su cintura.

Un momento, acaso su cabello es rosado ¿No es muy pequeña para teñirse?

Sin embargo no es lo más peculiar en ella... Sus ojos, ambos eran de distintos colores. Ya antes había observado a personas con eterocromía, sin embargo está es muy diferente a todas las que he visto.

Ambos ojos tenían los colores de las flores Sirenas, eran tan difíciles de describir con palabras, sin embargo uno era de un color opuesto al otro y por cada vez que la pequeña parpadeaba estos cambiaban, de forma aleatoria.

¡Es asombroso!

-Tardaron en llegar- pronunció la niña con voz serena, infantil y juguetona.

-¿Donde estamos?- dije

Luego de preguntarle eso nos miro a ambos, a Lu y a mí, intercaladamente, cerro sus ojos y al abrirlos ambos eran grises, del color del plomo.

Nos obsequio una pequeña sonrisa de lado y extiende su mano señalando hacia atrás de ella.

- Si son ustedes... Los están esperando- Una puerta se dibujo rápidamente dónde ella señalaba la cuál ella abrió.

-¿Quiénes nos esperan?- espete ante lo que ella dijo.

-Si quieren saberlo, tienen que seguirme- dijo antes de desaparecer a través de aquella puerta, muy parecida a la primera.

-¿Seguirla? ¡No podemos hacerlo, no sabemos quién es!- Lu se exaspera al notar como pienso en aquella propuesta -Mejor regresemos - halo de mi mano para regresarnos pero ya era tarde, no había camino y lo que quedaba de el se estaba desapareciendo.

-Tenemos que seguir, no les queda más opción. Si nos quedamos acá nos perderemos en el vacío ya que el camino está desapareciendo. Tenemos que avanzar- la tomé de ambas manos -te prometí que cuidaría de tí y eso haré, no tengas miedo - la mire directo a los ojos dándole un poco de mi seguridad.