Haseki Mahidevran sultan

CAPITULO 30

Palacio topkapi (1534)

Narra Mahidevran

Mientras pasaban el ataud por el harem para llevar a la madre sultana a su tumba, el mundo hoy vestia de negro no solo una de las personas mas importantes para el sultan tambien lo fue para muchos y hasta las personas que mas rezaban por verla sufrir, en ese dia lloraron tambien 

No se pudo salvar, todas las esperanzas y emociones para que se recuperara fueron borradas al instante y cambiadas por oscuridad y tristeza, dandole el ultimo adios a la gran madre sultana

Me sente al borde de mi cama donde mis hijos me veian, las lagrimas por mas que las queria detener me salian, esto para mis hijos era tristeza y ala vez confusion ya que era la primera vez que lloraba al frente de ellos, o por lo menos con ellos

El unico que me habia visto llorar era Mustafa pero solo una vez y fue muy pequeño si algun dia le llegan a preguntar por eso el dira que no sabra nada, me dolia la cabeza trate que se pasara el dolor pero fue imposible 

Tocaron la puerta de mis aposentos, y entro Mustafa enseguida vino a mi para abrazarme el tambien estaba llorando, nos apartamos para despues ver a mis hijos y decirles

-tampoco me van a abrazar 

Y todos corrieron a hacerlo

Luego de ponerlos a dormir me dirigi a la terraza, la luna estaba muy brillante y las estrellas en el cielo hacian que la vista sea hermosa 

Mire hacia la terraza del sultan, que se encontraba sola de seguro el sultan se encontraba adentro tratando de sobrellevar el dolor que no solo el tenia si no que todo el imperio padecia 

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2 meses despues

Habia llamado a Esmeray y Ahmed a mis aposentos, hace meses que les prometi uno aposentos, pero se me habia olvidado por completo tras la recien muerte de la madre sultana, pero ya tengo los aposentos listos

Ultimamente la tencion en el harem se ha hecho mas grande ya que el sultan dejo que Hurrem todavia estuviera a cargo del harem y al parecer a nadie le gustaba, pero eso no era un impedimento para ella que cada vez que la veia se mostraba con arrogancia 

Escuche la puerta de mis aposentos abrirse y escuche pasos dirijiendose a la terraza donde estaba sentada mirando la hermosa vista

Se acercaron e hicieron una reverencia, dejando de prestarle atencion a la vista para enfocarme en mis hijos, me acomode mejor para empezar a hablar

-como ambos saben yo les prometi unos aposentos, debido a la reciente muerte de la madre sultana no habia tenido el tiempo para terminarlos de hacer... sobre eso les tengo noticias, los aposentos ya estan listos 

Se acercaron a mi con una sonrisa para besar mi mano, luego de que lo hicieran Esmeray fue la primera en hablar

-madre, ¿donde seran mis aposentos?

-los mios quedaran muy lejos madre 

-no se preocupen, los aposentos son muy grandes, no tendran ningun problema de compartirlo 

La sonrisa que antes portaban en su rostro se desvanecio y me miraron muy confundidos

-madre de que hablas

-es un chiste cierto

-lo que oyeron es cierto, todavia no era momento de tener sus propios aposentos, y como vi que ambos querian no le vi problema en eso, ustedes son hermanos, nacieron juntos, viven juntos y comparten juntos no les pasara algo si comparten los mismos aposentos