Decides aventurarte en la fiesta más importante y esperada de todo el año universitario, considerada como el «cielo en la tierra». Aquí tienes la oportunidad de conocer a nuevos compañeros, amigos e incluso un interés amoroso con el popular estudian...
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Con Yunjin nos quedamos un tiempo dentro de la pequeña cueva para que ella me arreglara un poco, según ella me encontraba como si fuera el juguete de un bebé; el cabello desordenado, labios rojos y la ropa casi colgando de mi cuerpo.
—Ese tipo tiene un fetiche con los lugares públicos, primero un baño y ahora una piscina... Tuvieron suerte de que todos estábamos gritando afuera— Yun arregló mi cabello hacia un lado de mi hombro.
—Que vergüenza...— escondí mi rostro en mis manos recordando lo qué pasó hace unos minutos.
—Don't worry, es mejor quedarse con la anécdota que con la duda. Digo, que otro día vas a tener la oportunidad de follar con alguien en la pisci...— mis manos viajaron a sus labios para evitar que completara la oración, ahora me sentía peor.
—Cómo sea... ¿Qué fue lo que te susurró al final?— apartó mis manos para poder hablar.
—Casi lo olvido, me dijo que llegara a las 8:00 pm a su habitación. ¿Debería ir?
—Me estás jodiendo, obviamente tienes que ir. Seguro quiere aclarar las cosas— una tercera persona se agregó a nuestro pequeño círculo, era Ningning.
—¿De qué hablan? El agua está calientita acá— Ning sumergió un poco las clavículas al agua.Yunjin y yo nos volteamos a ver al mismo tiempo evitando reír. Si supiera el por qué...
—Ning, si alguien con el que te has acostado por dos noches seguidas te pide encontrarse en un espacio solos ¿qué pensarías?— Yunjin se giró a la pelirroja.
—¿Que quiere follar otra vez?— contestó esta última confundida.
—Mierda, ¿ustedes sólo piensan en eso?— se volteó a pegarle un codazo a Ningning, tratando de que colabore.
—Auch... ¿Qué otra cosa va a querer? Son hombres— la pelirroja rodó los ojos.
—¿Pero qué tal si él es diferente?— Yunjin seguía insistiendo.
—¿Hablar? Así llegan a un acuerdo— al fin Ning adivinó aquello que Yunjin tanto esperaba.
—Exacto. Ves corazón, él quiere hablar contigo— ahora dirigió sus palabras hacia mí.
—¿Y qué le digo?— pregunté incrédula. Llevaba casi unos dos años sin salir con alguien formalmente, por lo que se podía notar mi nula experiencia en todo esto.
—Pues, primero deben aclarar si lo suyo es solo sexo o si quieren algo serio. O tal vez ninguno de los dos...— Ning mencionó, bajando un poco el volumen de su voz en las últimas palabras debido a la mirada asesina que le proporcionó Yunjin.
—Dile en dónde se verán— Yun insistió.
—En un cuarto.
—¿¡Te cogiste a alguien de acá!?— la pelirroja alzó la voz más de lo esperado, tuve que sacar mi cabeza para revisar que nadie de afuera haya escuchado.
