LAZOS CONFUSOS

CAPITULO 2

EVANGELINE

Me meto la cuchara del blizzard de oreo en la boca, escuchando atentamente a Melissa que no deja de insistirme en salir con su prima.

Blanqueo los ojos nuevamente.

—Ya te dije, que no es mi tipo—me recargo en la mesa y hago a un lado el helado, mientras me ajusto la gorra—. No puedo creer que estoy desperdiciando mi hora de comida en esto Mel.

—Solo digo—le da un trago a su malteada de fresa y se echa para atrás—que todas tus relaciones fallan porque sales con heterocuriosas y Sandy es completamente lesbiana.

Me quito la gorra, porque estar en la terraza del Dairy Queen donde trabajo, me está empezando hacer sudar. Hace un calor infernal.

—No me interesa tu prima Mel. Deja de molestarme con eso.

—Es eso—abre la mochila que carga y saca un cuaderno—o revisamos la nueva alineación de porristas para el torneo.

—Mil veces eso—sonrio y se la quito, leyendo los nombres y las posiciones de cada chica, incluyendo la mía.

Soy la Capitana del Colegio Emily Dickinson. Es uno de los colegios más prestigiados de todo el país, es característico por ganar torneos intelectuales y atléticos, dándole entradas a que los mejores promedios y apellidos tengan pases directos a las escuelas de la Liga ivy.

Pero como acabo de decir, solo los apellidos y promedios entran. Aunque en realidad, siempre se guían mas por la primera opción.

Los apellidos más sonados son los primeros en ingresar, los becados como yo, nos quedamos en listas de espera. Pero eso no me quita las ganas de querer entrar a Columbia.

Soy la mejor de la escuela, tengo las mejores notas, estoy en la mayoría de los talleres, hablo 4 idiomas, toco 6 instrumentos, he ido a certámenes intelectuales y soy la capitana de porristas.

Pero, mi apellido no es muy reconocido.

Los Lamb no tienen tantas influencias como los Alberts o los Abigor, que son de las familias más ricas del País y todas sus generaciones han ido ahí.

Tengo cartas de recomendaciones y trabajé en las vacaciones pasadas con Lugur Abigor en sus viñedos, eso hace que mi curriculum se vea aún mejor.

Sin olvidar que su hijo sale o salía con mi hermana. Aun no sé qué se traen esos dos.

Pero no quiero entrar ahí por medio de palancas, quiero demostrarme a mí misma que puedo hacerlo con esfuerzo y toda la dedicación que le he puesto.

Así que como ya es mi último año, debo tener todo a la perfección. Me he alistado desde la secundaria y no quiero dejar que nadie me arruine mi plan para entrar.

Este es mi último torneo Nacional de porristas como Capitana, ganamos hace dos años y el pasado, así que, como Columbia tiene un equipo de animadoras espectacular, es mi último toque para mi solicitud. Yo seré la Capitana representando a Los Ángeles y los cazatalentos se fijarán en mí, así que no me puedo permitir fallar.

—La alineación está mal—le digo a Mel que ahora está comiendo de mi blizzard.

—Yo la hice, no puede estar mal—lo deja y ahora toma de su malteada.

—Mel, me pusiste como Flyer, para al menos 12 presentaciones—le quito la malteada para que me vea.

Mi mejor amiga se pasa las manos por su albino cabello y sus ojos azules me miran con una chispa de gracia.