⛩️┃i feel, seo yul
Naksu y Yasha fueron considerados los mejores asesinos de todos los tiempos veces dondequiera que fueran, cabezas enrollado alrededor durante una pelea, ambas jóvenes resultaron gravemente heridos, dañando su vida para no perder...
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I FEEL, seo yul
THREE, young master
CAMINANDO ENTRE LOS OTROS SIRVIENTES DE LA CASA JANG Yasha movió los listones rosas colocados en su cabello, estos sujetaban dos trenzas que se hicieron con los primeros mechones frente a su rostro, dejando el resto de su cabello oscuro cayendo sobre su espalda la más joven viste el mismo estilo de ropa que su amiga, solo que en diferentes colores
Yasha vestía pantalones beige claro y una camisa rosa claro, que contrastaba con su tono de piel mientras escuchaba a Naksu hablar de que tal vez el joven maestro debía haberla traído a ese lugar porque estaba enamorado de ella, Ji-rim solo asintió, perdida en sus pensamientos
La menor se cuestionó sobre el joven que había visto en medio de las carpas hacía unas horas ¿Fue él mismo? ¿O la mente de Yasha le estaba jugando una mala pasada? Al cruzar el pasillo de la casa Jang, los otros sirvientes notaron a las jóvenes cuando finalmente se detuvieron frente a la puerta de la habitación del joven maestro y Ji-rim obligada a salir de sus pensamientos, escuchando a Naksu gritar a su lado
-¡Joven maestro! Soy yo, Mu Deok-i estoy aquí con Park Ji-rim
-Pasa- preguntó el mayor con calma
-Joven maestro, nos gustaría agradecerle por salvarnos y traernos aquí
preguntó Naksu, fingiendo una sonrisa e inclinándose, y luego de ver a Ji-rim a su lado mirando distraídamente a su alrededor, le dio una palmada en la espalda a la joven, haciéndola ella se inclina y mira al mayor irritada
-Se necesitaron algunos hombres para arrastrarlos y traerlos aquí- El hombre se encogió de hombros, volviéndose hacia el dúo -Estoy decepcionado-
-se que fue de mala educación de mi parte amenazarte con una pata de cangrejo, pero espero que lo dejes pasar- Dijo con una falsa sonrisa amable, luego desvió su mirada hacia Yasha y le hizo un gesto para que ella hiciera lo mismo
-Sí... - Asintió confusa -Lamento haberte amenazado con esa… taza de té
-Ahora han aprendido modales
-Haremos nuestro mejor esfuerzo para servirle- continuó Naksu
-Genial, hazlo- Él asintió con indiferencia -¡Oye! Ve a buscarme un poco de agua
-Sí, joven maestro- asintió Mu Deok-i, arrastrando a Ji-rim y también lo eran las largas horas de sus largos días
-No es agua para beber, es agua para lavar- otra fue -En lugar de lavarme la cara, me voy a duchar
Las chicas iban y venían todo el tiempo las dos prepararon la bañera, y en cuestión de segundos comenzaron las líneas de humo
-¡Guau, hace mucho calor!- Después de traer agua fría -¡Guau! ¡Hace mucho frío ahora!- Cuando se servía la comida, siempre había una queja, como -¡Está salada! Eso es dulce ¡Demasiado picante! No voy a comer eso, ayer ya comí lo mismo
