Esta es una re-escritura de una historia que escribí en el pasado. Le voy a cambiar varias cosas, pero más o menos es la misma trama, así que no se preocupen.
●Cualquier parecido con otra historia es pura coincidencia, ya que hice esta historia con...
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Pekin - China
01:34 AM
Azotea
Cuál era.. El sentido real de la vida..?
Nacer. Crecer. Muerte.
...
Muerte...
Para qué vivir si lo único que nos esperaba era muerte?
Para qué vivir si la gente que promete quedarse a tú lado también muere?
Para qué... Vivir..?
Caí
...
Me sentía como si estuviera envuelta en una calida manta, una muy húmeda.
¿Donde estaba? ¿Esto es lo que había después de la muerte? No.. No lo creo.
En algún punto empecé a escuchar ruidos y al mismo tiempo sentí como si tirarán de mi y me alejarán de ese cálido sitio, para tirarme a un mundo frío y turbio.
Escuchaba los llantos de una mujer; parecía llorar por alguien. También podía escuchar de fondo gritos desgarradores. ¿Qué diablos ocurría?
En algún punto sentí como alguien me tomaba en brazos y pronto mi visión se vio acaparada por una hermosa mujer de rubios cabellos y ojos rosados.
—Mi dulce niña.. Bienvenida al mundo... Tú nombre será Bina.. —La mujer hablo con un tono cálido y maternal, aunque un poco muy agotado.
Procese un poco mi situación, y aunque parecía poco creíble, realmente parece que había vuelto a nacer.
Pronto sentí que me alejaron de los brazos de mi -al parecer- madre y me dejaron al lado de otra bebé recién nacida, esta no paraba de llorar y llorar, me irritaba un poco, pero supongo que era normal para una recién nacida llorar, no?
En un momento sentí fuertes pasos acercarse a la habitación, la mujer que me había arrebatado de los brazos de mi madre ahora se plantaba frente a nosotros en forma de escudo.
Por el costado de la mujer de cabellos castaños pude ver a un hombre, mirada azul enjollada y un cabello rubio. Diría que era encantador, pero portaba un atuendo manchado de sangre que arruinaba cualquier tipo de creencia de ese tipo.
Bien, esto definitivamente ya no era normal. En primer lugar, desde cuando fue esto normal?!
Segundos después ya no me sentía capaz de escuchar nada de lo que decían, mis párpados pesaban. Pronto caí dormida.
