Siendo prófugos en Rio de Janeiro, Brian O'Conner decide buscar a su hermana menor, quien residía en el mismo lugar.
Sabrina O'Conner jamás creyó volver a ver a su hermano, pero cuando este necesitó ayuda para un trabajo no dudo en ayudarlo.
Rápid...
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¿Qᵘé ʰᵃᶜᵉˢ ᵃqᵘí?
Londres, Inglaterra
Deckard Shaw
Observaba la vista desde la habitación del hospital donde Owen se encontraba, con las sirenas de policía de fondo. Apreté los puños con impotencia, mi hermano en un coma inducido y la imagen de Brina consolando a los mellizos, es algo que no voy a olvidar.
-Dicen que si quieres ver el futuro, solo debes mirar atrás- inicié- Antes me parecía una estupidez, pero ahora sé, que nadie huye del pasado- volteé caminando hacia la camilla donde mi hermano se encontraba- Cuando éramos niños- le hable con la esperanza de que me escuchara- Tu provocabas a los malditos más rudos de la calle, pero yo siempre tenía que entrar para acabarlos. Cuando conociste a Sabrina, era ella quien te ayudaba- me senté en la silla a su lado- Robabas de la tienda del barrio, pero yo siempre me enfrentaba al cinturón del viejo- alegué- Pensé que lo superarías, pero jugar al gangster te hacía más rudo, más listo, superior, pero supongo que en fondo siempre supe que terminarías así, a pesar de todo lo que te enseñe- apoye mi mano en la suya, sintiendo el frío metálico del collar- Aun así, tu eres mi hermano, mi mejor amigo- susurré lo último- Y lo serás por siempre, la cruz que debo cargar- quité el collar de la mano de Owen, me levanté del asiento.
-Debemos irnos- mi esposa entró en la habitación, tenía un pequeño corte en la ceja y un arma en cada mano.
-Descansa, hermanito- me dirigí hacía Owen dejándole un arma en la mano- Mientras Brina y yo saldamos tu última deuda- me encaminé hacia mi esposa- Cuiden a mi hermano- le hable a las enfermeras al pararme al lado de Brina.
-Si algo le pasa, la pagarán ustedes- la rubia les guiño un ojo antes de que la empujara levemente por la espalda baja para encaminarnos hacia la salida del hospital.
Brina guardó sus armas al entrar en el elevador, observó antes de que las puertas del elevador se cerrarán a los cadáveres de los agentes de la DSS y las chispas de las luces por el desorden que habíamos hecho solo para ver a Owen.
