chapter Three

97 25 1
                                    

—...No puedo decirte mucho, ¿no es ciencia ficción de conocimiento común decirle a alguien demasiado del futuro? Podría arruinar su futuro o el de otros.

—𝘚𝘶𝘱𝘰𝘯𝘨𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘵𝘪𝘦𝘯𝘦𝘴 𝘳𝘢𝘻ó𝘯—Haerin suspiro—𝘣𝘶𝘦𝘯𝘰 𝘢𝘩𝘰𝘳𝘢 𝘴𝘦 𝘲𝘶𝘦 𝘮𝘦 𝘮𝘶𝘥𝘦 𝘺𝘢 𝘲𝘶𝘦 𝘢𝘩𝘰𝘳𝘢 𝘷𝘪𝘷𝘦𝘴 𝘦𝘯 𝘮𝘪 𝘤𝘢𝘴𝘢.

—Entonces ¿quien es Jae?—pregunto minji.

–𝘶𝘯 𝘢𝘮𝘪𝘨𝘰, 𝘴𝘦 𝘭𝘭𝘢𝘮𝘢 𝘑𝘢𝘬𝘦 𝘱𝘦𝘳𝘰 𝘭𝘦 𝘴𝘰𝘭𝘦𝘮𝘰𝘴 𝘥𝘦𝘤𝘪𝘳 𝘑𝘢𝘦 𝘺 𝘴𝘶𝘱𝘰𝘯𝘨𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘵𝘪𝘦𝘯𝘦𝘴 𝘴𝘶 𝘵𝘦𝘭é𝘧𝘰𝘯𝘰, 𝘢𝘶𝘯𝘲𝘶𝘦 𝘯𝘰 𝘴𝘦 𝘤𝘰𝘮𝘰 𝘵𝘦𝘳𝘮𝘪𝘯𝘰 𝘦𝘯 𝘮𝘪 𝘤𝘢𝘴𝘢.

—¿en serio? ¿Eso es lo que te confunde? ¿Que pasa con la parte de 'hablar con alguien de otro tiempo?

—𝘰𝘣𝘷𝘪𝘢𝘮𝘦𝘯𝘵𝘦 𝘵𝘢𝘮𝘣𝘪é𝘯 𝘦𝘴𝘵𝘰𝘺 𝘤𝘰𝘯𝘧𝘶𝘯𝘥𝘪𝘥𝘢.. 𝘵𝘦𝘯𝘨𝘰 𝘶𝘯𝘢 𝘱𝘳𝘦𝘨𝘶𝘯𝘵𝘢 ¿𝘤𝘶𝘢𝘯𝘵𝘰𝘴 𝘢ñ𝘰𝘴 𝘵𝘪𝘦𝘯𝘦𝘴?

—24—minji no sabía por que le estaba contando esto a una extraña pero su soledad y desesperación se apoderaron de ella.—¿y tu?.

—21—Haerin repondio sin dudar y minji solo asumio que era una mujer segura de si misma.

—¿A que te dedicas?—minji dejo que la curiosidad remplazara su ansiedad por el teléfono mágico.

Haerin rio entre dientes—𝘌𝘯𝘴𝘦ñ𝘰 𝘣é𝘪𝘴𝘣𝘰𝘭 𝘢 𝘯𝘪ñ𝘰𝘴 𝘱𝘦𝘲𝘶𝘦ñ𝘰𝘴, 𝘮𝘦 𝘦𝘯𝘤𝘢𝘯𝘵𝘢 𝘦𝘭 𝘣é𝘪𝘴𝘣𝘰𝘭 ¿𝘺 𝘵𝘶?.

—¿si amo el béisbol? o ¿que hago para ganarme la vida?

—𝘩𝘮 𝘱𝘰𝘳𝘲𝘶𝘦 𝘯𝘰 𝘤𝘰𝘯𝘵𝘦𝘴𝘵𝘢𝘳 𝘢𝘮𝘣𝘢𝘴, 𝘵𝘦𝘯𝘨𝘰 𝘵𝘪𝘦𝘮𝘱𝘰.

Minji se acostó en la cama y miró el techo—No soy muy fan de los deportes y me gano la vida programando video juegos para computadoras.

—¿𝘘𝘶𝘦 𝘵𝘪𝘱𝘰 𝘥𝘦 𝘵𝘳𝘢𝘣𝘢𝘫𝘰 𝘦𝘴 𝘦𝘴𝘦?

Minji sonrio—Olvidé que probablemente todavía no sepas lo que son.

—𝘴𝘪 ¡𝘏𝘰𝘭𝘢! 𝘌𝘴𝘵𝘰𝘺 𝘦𝘯 𝘱𝘢𝘴𝘢𝘥𝘰—Haerin bromeo y minji rio.

—bueno tengo que irme, ya debería irme a dormir.

—𝘉𝘜𝘜—Haerin abucheo en el teléfono.

Por divertido que fuera hablar con Kang ya se estaba haciendo tarde y tenía trabajo mañana.

—𝘈𝘥𝘪ó𝘴, 𝘯ú𝘮𝘦𝘳𝘰 𝘦𝘲𝘶𝘪𝘷𝘰𝘤𝘢𝘥𝘰—Haerin se despidio.

—Adiós anciana.

—𝘰𝘺𝘦, 𝘦𝘯 𝘮𝘪 𝘵𝘪𝘦𝘮𝘱𝘰 𝘢𝘶𝘯 𝘴𝘰𝘺 𝘫𝘰𝘷𝘦𝘯—Haerin rio antes de colgar.

Había pasado una semana desde que Minji y Haerin empezaron a hablar, volviéndose buenas amigas.

Minji había comenzado a comer en su habitación esperando la llamada, siempre a la misma hora todos los días y nuevamente durante la cena.

Hablaban de cualquier cosa y todo a su vez, incluidas sus infancias y las cosas favoritas de sus respectivas épocas. Haerin le había hecho prometer a Minji que no la buscara en 2020, ni que tratara de buscarla por Internet. Minji le dijo que cumpliría su promesa y continuaron hablando como si la única distancia entre ellas fueran millas y no el mismo tiempo.

—sabes es extraño, hablar con alguien sin tener la menor idea de como se ve esa persona—Minji rio

—𝘵𝘦𝘯𝘨𝘰 𝘶𝘯𝘢 𝘪𝘥𝘦𝘢, 𝘦𝘴𝘱é𝘳𝘢𝘮𝘦 𝘢𝘩𝘰𝘳𝘢 𝘷𝘶𝘦𝘭𝘷𝘰.

Minji espero pacientemente contando las flores en su pared, cuando escucho como volvía a sostener el teléfono pregunto—¿Cuál es tu idea?.

—𝘝𝘦 𝘢 𝘭𝘢 𝘱𝘢𝘳𝘦𝘥 𝘫𝘶𝘯𝘵𝘰 𝘢 𝘭𝘢 𝘷𝘦𝘯𝘵𝘢𝘯𝘢.—Minji se quejo indicando su cansancio, pero Haerin insistió en que fuera. A regañadientes se levanto y se dirigió hacia la ventana.

—¿ahora que?

Haerin estaba también junto a la ventana, las paredes con ella eran más nuevas e intactas que las de minji. Había ido al cobertizo por un bote de pintura verde lima, abrio el bote de pintura y escucho a Minji hablar.

—Haerin ¿que haces?.

—𝘚𝘰𝘭𝘰 𝘮𝘪𝘳𝘢 𝘭𝘢 𝘱𝘢𝘳𝘦𝘥.—mientras tomaba un pincel y aplicaba pintura en su mano—¿𝘓𝘪𝘴𝘵𝘢?.

—si, aunque no se para que-

De repente en la pared empezó a aparecer una mano color verde lima desgastada.

—𝘦𝘴𝘱𝘦𝘳𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘴𝘪 𝘭𝘰 𝘷𝘦𝘢𝘴 𝘺 𝘲𝘶𝘦 𝘯𝘢𝘥𝘪𝘦 𝘭𝘢 𝘩𝘶𝘣𝘪𝘦𝘳𝘢 𝘣𝘰𝘳𝘳𝘢𝘥𝘰.

Minji se quedó en silencio y distraidamente coloco su propia mano encima, la mano de Haerin parecía más pequeña que la suya.

—¿𝘔𝘪𝘯𝘫𝘪?—Minji retiro su mano con rapidez al escuchar la voz de Haerin.

—yo...si la veo—minji rio entre dientes

—¿𝘔𝘦 𝘵𝘰𝘮𝘢𝘴𝘵𝘦 𝘭𝘢 𝘮𝘢𝘯𝘰?

—quee...yo..—Minji se atraganto pero Haerin se echo a reír.

—𝘛𝘳𝘢𝘯𝘲𝘶𝘪𝘭𝘢 𝘴𝘰𝘭𝘰 𝘣𝘳𝘰𝘮𝘦𝘰—Minji escucho su risa—𝘮𝘦 𝘱𝘳𝘦𝘨𝘶𝘯𝘵𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘮á𝘴 𝘱𝘰𝘥𝘳í𝘢𝘮𝘰𝘴 𝘱𝘳𝘰𝘣𝘢𝘳.

Minji se sento en su cama, todavía mirando la mano y hablo—sabes, me pregunto por qué todavía no has visitado.

—𝘈 ¿𝘲𝘶𝘪𝘦𝘯?

—a mi, porqué en mi tiempo no has venido a visitarme, por ejemplo el 29 de julio para decirme que eres tu con quien hablo por teléfono—Minji reflexionó con curiosidad.

—𝘘𝘶𝘪𝘻á𝘴 𝘺𝘢 𝘦𝘴𝘵𝘦 𝘮𝘶𝘦𝘳𝘵𝘢.—Haerin dijo en broma.

Minji odio ese pensamiento, era posible y lucho contra su impulso de buscarla por Internet e intentar averiguar todo lo que pudiera de ella, pero ya le había prometido a Haerin que no buscaría sobre ella.

Al final se dieron las buenas noches y colgaron, Minji se durmio mirando la huella verde y preguntándose donde estaría Haerin ahora mismo.

𝗙𝗟𝗢𝗥𝗘𝗦 𝗗𝗘 𝟭𝟵𝟳𝟬 - 𝘔𝘪𝘯𝘳𝘪𝘯Donde viven las historias. Descúbrelo ahora