Un Deseo Prohibido (+18)

capítulo 8

Capítulo 8

Kiara

A Pesar del temblor en mis manos busco mi teléfono en mi bolso, apenas me subí al taxi le indique el nombre del hotel.

Es un completo imbécil 

Las lágrimas corren por mi mejilla, trato de evitar cualquier sollozo o llanto fuerte, no quiero que el señor se de cuenta que estoy llorando. 

Siento un dolor en el estómago el temblor en mis manos es mucho más fuerte que apenas puedo marcar el número. 

— Hola querida te estas..—sollozo—Kiara Joder ¿que pasa? 

—Estoy…camino al hotel 

—¿qué pasa? Estas llorando ki, dime que sucede.

—Fui…fui..a un bar donde estaba Dante, tuvimos una discusión, quiso llevarme e incluso me beso pero… 

Sollozo más fuerte 

—¿pero que? ¿Te toco de más? porque si es así lo mato.

—No, pero me besó después de haber estado con otra, su olor era desagradable. 

El señor del taxi me observa por el retrovisor y agradezco estar hablando en ruso con Raquel.

Dante no huele desagradable,  Dios yo amo su olor pero olía a otra mujer y sexo, eso si era desagradable.

—Tranquila ¿tienes tus pastillas contigo? —hago un sonido de negación—Tranquila si, no quiero que tus ataques vuelvan necesito que estés relajada y recuerda tus terapias.

Eres una mujer fuerte 

Eres inteligente e incluso más que cualquier hombre. 

Mereces lo mejor del mundo y no dejes que nadie apagué el brillo que tanto nos costó encender.

Nadie me toca sin mi consentimiento.

Yo puedo contra el mundo y cualquier adversidad que se presente.

Hago profundas respiraciones, recordando cada una de sus palabras.

—Señorita llegamos al hotel.

Observo el lugar y es cierto, me quedé en mis pensamientos y se me fue el tiempo.

—Muchas gracias señor.

Bajo del auto con el teléfono en mano que aún tiene la llamada.

—¿Sigues ahí? —pregunto

—Si claro, ¿ya estás mejor? Te escucho mejor.

Camino por el vestíbulo y sé muy bien que mi rostro debe estar rojo de tanto llorar menos mal no llevo tanto maquillaje. 

—Si estoy mejor, gracias por escucharme. 

—Siempre kiara sabes que todos tus amigos te amamos, Antony y Viktor estuvieron aquí ayer.

Sonrió ante la mención de ellos.

—Seguro molestando a Danielle

Viktor es demasiado coqueto y siempre la molesta en broma o eso creo yo.

—Si ya sabes como es, ¿bailaras cuando vuelvas?

—Sii, amo bailar y no dejaré de hacerlo solo porque a Dante le guste mi otro yo.

— Me imagino que le dirás o esperas a que se de cuenta por el mismo.

Como sea que se de cuenta me da igual.