YOUR 🎀

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Donghyuck toda la semana se sintió raro, a veces atrapaba a Mark observándolo o notaba su nerviosismo cuando estaban cerca, el castaño estaba confundido y trató de investigar pero fué imposible.

Los exámenes habían pasado de manera exitosa a ojos de Donghyuck, los temas fueron sencillos así que no hubo mucho problema en contestar las preguntas, salió del salón caminando hasta su casillero pero sin querer se encontró a Mark quedando frente a frente, levantó la vista y abrió los ojos en grande al ver que él otro lo miraba también.

- Hola...-. Saludó el castaño alejándose un poco del canadiense quien comenzaba a sentirse caliente de la cara.

- Hola Donghyuck...-. Habló tratando de sonar normal- ¿Terminaste los exámenes?-. Preguntó.

Donghyuck asintió acomodando sus gafas.

- ¿Quieres ir a comer algo?, Jeno tardará más porque el tonto no estudió, prefirió ir al bar con los de su equipo de volleyball y yo no he comido nada desde la mañana-.

Donghyuck se sorprendió por la invitación, ¿Debería ir o rechazarlo?, esto es demasiado raro para Donghyuck, pero si quería empezar a dar un paso debía hacer lo correcto.

- Oh, pero, no traigo dinero-. Sonrió tímido.

- No te preocupes, yo pago, ¿Vienes?-. Preguntó de nuevo.

El menor asintió y cuando Mark se dió la vuelta no pudo evitar sonreír y festejar en silencio para después calmarse e ir junto a él.

- ¿Sentiste fáciles los exámenes?-. Preguntó.

- Uhm, sí, algo así, ¿Y tú?-. Preguntó de vuelta bajando un poco la vista para ver al castaño.

- Fué fácil a excepción de inglés y francés, no soy muy bueno-. Dijo haciendo un puchero que a Mark le pareció muy lindo.

- Yo podría ayudarte-. Sonrió amablemente.

- Se qué sabes inglés, ¿Pero también sabes francés?-. Preguntó curioso y Mark soltó una risita risueña que a Donghyuck lo hizo ponerse tímido.

La sonrisa de Mark para el castaño era un tesoro tan hermoso, tan único y especial, amaba verlo sonreír y reír aunque fuera escandaloso, lo amaba demasiado.

- Viví en Canadá mucho tiempo y tuve amigos que venían de la provincia que hablan francés, me acostumbré a escucharlo y a hablarlo con ellos, soy algo bueno-. Admitió- Así que cualquier cosa no dudes en pedirme ayuda-.

Donghyuck le sonrió y asintió.

LLegando a la cafetería observaron que solo habían dos estudiantes concentrados haciendo su tarea así que no se preocuparon por tomar primero una mesa, Mark miró el menú y después al menor.

- ¿Qué quieres comer?, pide lo que quieras-. Sacó la cartera de su bolsillo trasero.

El moreno repasó el menú muchas veces y seguía dudando que pedir, odiaba que en la cafetería solo vendieran comida grasosa, no es que la odie, pero justamente había empezado su dieta del mes y la comida de aquí no le ayudaba mucho.

Mark lo miró y dudo en si decir algo pero al final accedió.

- ¿No puedes elegir?-. Preguntó y se sorprendió al ver cómo Donghyuck giró su rostro con rapidez quedando a escasos centímetros pero no le dió mucha importancia.

- No lo sé Mark, como puedes ver, soy una persona a la que le gusta mucho cuidar su figura y la comida de aquí no me ayuda-. Admitió.

Mark hizo una mueca entendiendo el punto.

- No soy quien para opinar Donghyuck pero...-. Se alejó un poco para mirarlo de pies a cabeza- No creo que una comida alta en calorías te venga mal ahorita, estás en buena forma, no te reprimas y come bien, digo, no estoy diciendo que las hagas mal en hacer dietas o cuidarte, pero es bueno consentirse de vez en cuando-. Sonrió.

Donghyuck lo miró por un rato cuando le sonrió, el canadiense pudo notarlo y simplemente sonrió para sus adentros, el moreno era bastante tierno y a Mark le parecía gracioso lo poco que disimulaba.

- Está bien, me convenciste Mark Lee, pero si subo mucho de peso te harás cargo-. Le advirtió.

- Está bien, si te hago engordar te ayudaré a bajar esas calorías haciendo cardio -. Le guiñó el ojo y volteó al frente dándole la tarjeta a la señora para pagar.

Donghyuck se sonrojó y giró el rostro avergonzado, al escuchar a Mark agradecer por la comida caminó atrás de él y se sentó frente a él.

- Una vez conocí a Jeno, fué el primer día de la Universidad, pero me asusté porque no dejaba de mirarme y se acercaba a coquetear-.

- Lo lamento, a veces es un poco raro, no lo sé, le atrae rápido la gente, pero después se desinteresa, es por eso que nunca ha querido formalizar una relación o algo por el estilo-. Alzó los hombros dándole una mordida a la hamburguesa- Al menos su hermano mayor lo regaña, es divertido ver cómo lo hace-.

- Me imagino, pero he de decir que es el mejor del equipo de volleyball- Le dió un sorbo a su jugo de uva- ¿Tú prácticas algún deporte o algo así?-. Preguntó.

- No, prefiero observar de lejos-. Admitió- Soy más de tocar instrumentos y escribir, también me gusta mucho la literatura, soy más de ese tipo-.

El corazón de Donghyuck se sintió cálido al escuchar los hobbies de Mark, quién diría que el extranjero es un chico tranquilo, definitivamente el moreno estaba enamorado de él.

- Interesante, creí que serías alguien que habitaba mucho en el gym o algo así-. Soltó una carcajada que hizo reír al extranjero.

- ¿Y tú? ¿Que acostumbras hacer?-. Preguntó.

- Bueno, me gusta mucho ir de compras, bailar y la repostería, me gusta mucho cocinar-. Lo miró.

- No sé porque imaginé varias cosas sobre ti exactamente iguales, aunque por otro lado creí que serías alguien irritable-.

Donghyuck pestañeó varias veces.

- ¿Tan mal me veo?-. Preguntó tocando su propio rostro.

- ¡No!, lo que quiero decir es que por tu vestimenta, tus gestos, la forma en que actúas-.

Donghyuck comenzó a reír al ver que hablaba bastante rápido tratando de aclarar lo dicho, estiró sus manos hasta tomar su rostro y lo miró.

- ¡Mark escúchame!-. Le gritó- Tranquilo, se que no quisiste decirlo de ese modo, está bien, de hecho es lo que casi siempre quiero aparentar, especialmente para los hombres, no me gusta que se me acerquen mucho, a veces son tarados y se sobrepasan, tu sabes-. Dijo lo último regresando a su asiento mirando al otro.

- Está bien, pero en verdad, perdón-. Se volvió a disculpar.

Donghyuck agradeció a Mark por el aventón en su auto y como otra parte de agradecimiento se ofreció a un día llevarle algún postre que hiciera.

Entró a su habitación tumbandose en la cama y con una almohada tapó su rostro para gritar lo que se estaba aguantando desde que Mark lo invitó a comer, la puerta fue tocada y su madre se asomó.

- ¿Pasó algo interesante hoy?-. Preguntó entrando con fruta picada.

- Mamá, hoy hablé con él, me invitó a comer, siento que estoy soñando, pellizcame-. Estiró su brazo- ¡Ah!-. Gritó y se sobó.

- Yo creo que no-.

Toda esa noche Donghyuck terminó pensando en Mark, Mark, Mark y solo Mark, el chico canadiense de sonrisa hermosa, ojos brillosos, cabello oscuro, aura tranquila y amante del arte, definitivamente era el tipo de Donghyuck, aunque nunca se le escapa el detalle de que Mark tiene brazos marcados lo cual significa que el cuerpo puede estar igual.

Su rostro se sonrojó al recordar cómo tomó su rostro, los ojos del chico mirándolo y confirmandole que su cuerpo era lindo así como estaba.

Estaba enamorado, bastante enamorado.

ONE OF YOUR GIRLSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora