000. Prólogo

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Dedicada a __IAmYourName__

[Eres un gran amigo, Lu.]
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Bajo las luces de neón en la hermosa ciudad de Tokio, dos zorros caminaban apresuradamente hacia el apartamento que ambos habían rentado en el barrio de "Sumida". El vulpino de tonos naranjas y oscuros intentaba detener en vano a su pareja de misma especie pero con tonos azulados, sus suplicas y pequeñas risas nerviosas llamaban la atención de los transeúntes que pasaban cerca a ellos, los cuales con lastima y cierta gracia volteaban la mirada hacia otra parte o reían levemente por la situación del zorro mas alto.

───── ¡Cariño, hablemos por favor! ───── trotó hasta llegar a la par de su pareja, quien no aminoraba el paso. ───── ¿Fue por algo que dije? ───── preguntó, tomando la mano del azul, quien se zafó en un movimiento.

El zorro menor volteo levemente, la mirada llena de molestia y obviedad que le dio a Tails fue mas que suficiente para que este entendiese que la había cagado. «¡Bien hecho, idiota!», se reprendió a si mismo, soltando un chasquido con su lengua.

───── ¡Ok, ok! ───── dijo mientras se colocaba enfrente de su pareja, cortándole el paso. ───── Dije algo terrible, algo que no debía y me disculpo por eso.

Kit simplemente paso a su costado y continuo su camino, aquello irrito un poco al zorro de tonos naranja, nada parecía funcionar para aplacar la ira del aguamarina. Pero para suerte de ambos (sin darse cuenta incluso), finalmente habían llegado a la entrada del condominio en el que residían; El menor entró con rapidez, la fuerza que había utilizado para abrir la puerta que llevaba al lobby hizo asustar al guardia que se hallaba dormido en su puesto, despertado abruptamente por el estruendo de la puerta al chocar con la pared.

───── ごめん! (¡Lo siento!) 

Se disculpo el mayor por la actitud de su pareja, dando una leve reverencia al guardia, este solo negó con la cabeza y le indico que siguiera su camino, dándole suerte para resolver los problemas en el paraíso, lo cual hizo reír un poco al naranja, para después subir las escaleras a toda prisa hasta llegar al 5° piso (lugar donde se hallaba su apartamento). 

───── ¡Kit, cariño, mi corazón de melón, dime que te molestó! ───── alzó la voz al no ver al zorro por ningún lado cercano a la entrada. Entonces, entró, cerrando la puerta tras de si y cuando menos se lo espero, la voz iracunda del aguamarina le erizo el pelaje.

───── ¡Tú sabes que dijiste! 

Por instinto, el vulpino mayor se persigno en nombre de Chaos para salir ileso de la furia de su pareja. Y como si Chaos en verdad lo estuviese protegiendo, vio en cámara lenta como un zapato pasó por su costado, chocando con la puerta y ocasionando un estruendo que le puso los nervios de punta. Al devolver su vista al frente, pudo ver al aguamarina con el brazo extendido hacia él, su pelaje desaliñado y sus ropas desordenadas lo hacían ver. . .sexy, tan sexy que el naranja no pudo evitar bajar su mirada hasta que otro zapato que le cayó en el rostro evito terminar su recorrido.

───── ¡MIS OJOS ESTAN AQUI ARRIBA! ───── dijo el vulpino azulado mientras se cruzaba de brazos, mirando furioso al contrario. ───── ¡¿Cómo te atreves a decir semejante barbaridad en plena cena familiar?!

Always YoursWhere stories live. Discover now