El pequeño azabache sostenía a su nuevo felino entre sus brazitos, moviéndose ligeramente de lado a lado en busca del sueño de este.
Desde la otra esquina de la habitación, Donghyuck observaba la tan linda escena con una sonrisa, junto a sus grandes ojos que, esta vez llevaban consigo un brillo especial.
Era como ver a un gatito cuidar de otro gatito. Pensaba.
Sin contenerse por mucho tiempo, y sin siquiera intentarlo realmente, el coreano se acerca a su amigo casi a saltos.
—Renjun~
—Shhh —lo calla, mirándole feo—. Lo despertarás.
—Yah~ —pucherea, hablando bajo, pero a la vez acercándose más al cuerpo ajeno—. ¿Ya escogiste un nombre? —pasó sus manos por detrás de la cintura de Renjun y lo abrazó.
Huang no hizo nada, sabía lo pegote que era su amigo. Y en secreto le encantaba.
Quizás demasiado.
—Cookie —respondió, sin más.
—Yo creo que debería llamarse Haechan, es un lindo nombre —bromeó, riendo ligero.
—Que feo. Cookie es mejor —ahora era él quien reía, sintiendo a Donghyuck fruncir el ceño cerca de su cuello.
—Malo~ —lloriqueó, y se separó, caminando hasta la cama para luego recostarse y suspirar.
Debían hacer al menos unas cuatro tareas, pero al parecer su amigo estaba muy ocupado con su nuevo trabajo de madre.
Probablemente terminarían copiándole todo a Mark.
—Haechan —medio gritó emocionado el más bajito, aún con el gato en sus brazos—, míralo, está con la lenguita afuera —se acercó a la cama y bajó su cuerpo, dejando visible al animal con su rosa lengua expuesta.
Igual a Renjun cuando sacaba su lengua porque estaba concentrado.
—Que gatito más bonito eres, Cookie —le decía al felino, con voz aniñada.
—No más que tú, gatito Junnie.
—Ya, Hyuck —le reclamó con un leve sonrojo. Donghyuck siempre hacia ese tipo de comentarios que lo dejaban todo rojito.
La tarde de los chicos fue una mezcla entre charlas y ver al animal dormir, aprovechando de sacarle fotos por lo adorable que se veía.
Y Donghyuck no perdió la oportunidad de fotografiar a su amigo también, pidiéndole que le sonriera bonito como siempre lo hacía.
Luego de eso, Lee se largó de su casa, no sin antes decirle a su amigo que debería cambiarle el nombre a Haechan.
Deze afbeelding leeft onze inhoudsrichtlijnen niet na. Verwijder de afbeelding of upload een andere om verder te gaan met publiceren.
