Meaning Of Love || Bakudeku Broshiping || One Shot

Capítulo Único

Katsuki Bakugo siempre había sido una persona con una personalidad explosiva, sobrereaccionaba de más así como era sencillo irritarlo, sin embargo, no era una mala persona y nunca pretendió serlo.

Izuku era una clara muestra de ello.

Ese chiquillo de cabello verde y de pecas siempre lo seguía a todos lados, murmuraba sin parar y su voz era un tanto irritante. No era algo que Bakugo suela tolerar o siquiera considerar vivir, sin embargo, Izuku era la excepción porque lo amaba.

Claro, no lo amaba con el mismo contexto con el que la mayoría de las personas solían decir "te amo", para Bakugo, amar no solo se cerraba a querer a una persona al punto de querer compartir una vida románticamente hablando, claro, era válido, pero amar era compartir momentos juntos y apreciar a alguien al punto de no querer alejarte de esa persona sin importar el contexto o términos con el que estés con esa persona, puedes amar a un amigo, a un hermano, a tus padres y no necesariamente querer tener algo romántico con ellos.

Y Katsuki amaba a Izuku porque era su hermano. Si bien no compartían sangre o siquiera apellido ambos eran más cercanos que unos simples amigos y eso ambos lo sabían.

Es por eso que le dolía tanto ver a su hermano llorar en el cuarto de limpieza de la escuela, su uniforme negro estaba lleno de polvo y su rostro tenía algunos rasguños y barro, le dolía mucho no poder defenderlo siempre aún si iban a las mismas clases, le dolía mucho escucharlo sufrir por algo que Izuku nunca había elegido.

Ser libre de Quirk -odiaba el término Quirkless porque reducían a las personas como Izuku a inútiles- en la actualidad te convertía en una paria social, era más probable que una persona libre de quirks muera por razones de discriminación, véase crímenes de odio, negligencia médica, negligencia infantil e incluso suicidio que morir de viejos o de forma natural, le pesaba saber que si las cosas empeoraban Izuku se convertiría en una estadística más.

Sus tenis blancos apenas resonaron en el reducido espacio que estaba lleno de productos de limpieza, y sin pensarlo, se sentó al lado de Izuku.

- ¿Puedo quedarme contigo? - Su voz que por lo usual era fuerte y grave sonaba suave, lo último que Izuku necesitaba en esos momentos eran ruidos fuertes incluso si era su voz.

Pudo ver al bulto de pelo verde moverse de arriba a abajo por el pequeño asentimiento de Izuku. Bakugo sintió su pecho apretarse, ¿cómo era posible que ese mocoso vibrante de alegría que brillaba más que el sol ahora esté en ese estado tan deplorable?, no sabía quiénes había sido, pero si lo descubría claro que no se iban a salir con la suya.

- ¿Te puedo abrazar? - Nuevamente preguntó con el mismo tono de antes, y una vez más, vio al adolescente asentir.

Y dicho y hecho, Bakugo abrazó a Izuku. No fue un abrazo fuerte y asfixiante, fue un abrazo dulce y suave lleno de calidez. Pudo sentir como los brazos un tanto cortos y delgados de Izuku se apresuraban a abrazar a Bakugo.

- ¿Quiénes fueron? - Su voz sonó un poco tosca, pero estaba reteniendo su enojo para no molestar o asustar a la pequeña figura verde envuelta en sus brazos.

Nuevamente el cabello de Izuku se movió de un lado a otro, negando con la cabeza.

- No importa... - Respondió el chico de pecas con una voz entrecortada.

Ah, bien, Bakugo sabía que no se lo diría tan fácilmente, lo entendía, Izuku no quería que él terminará con una mancha en su historial que le impida entrar a la UA, y por una parte lo apreciaba, pero ¿qué no los héroes salvan a las personas?, Bakugo pretendía hacer eso, darle una paliza a esos extras por meterse con Izuku si bien no era algo tan heróico, mantendría a esos imbéciles fuera del radar y dejarían a Midoriya en paz.

Pero también eso significaría que esos imbéciles fueran precavidos al momento de... bueno, tiene un punto. Es como él mismo, tenía padres estrictos que le limitaban muchas cosas, sin embargo, siempre buscaba una forma de hacer esas cosas sin que sus padres se dieran cuenta, puede que esos estúpidos extras apenas tengan la capacidad de pensar razonablemente, pero sabía que si se lo proponían no solo buscarían la forma de golpear a Izuku a sus espaldas, sino que también Midoriya ya no confiaría tan plenamente en él.

Tal vez ir a esa terapia del manejo de la ira le había quedado como anillo al dedo, al menos puede pensar mejor en las consecuencias de sus actos.

- Escucha... se que piensas que busco golpearlos, y tienes razón - Confesó, llevando su mano a la espalda de Izuku - Pero no lo haré, esos imbéciles no merecen siquiera ser el saco de boxeo del próximo número uno - Escuchó una pequeña risita del peliverde, lo que le hizo sonreír un poco - Pero hablando en serio, esos puñetazos que le quiero dar a esos imbéciles no valen más que lo que tú sientas, tú vales más que esos estúpidos, porque tú vales mi tiempo y mi preocupación porque eres importante para mí y quiero que confíes en mí, no los golpearé, pero te prometo que ambos buscaremos una solución para que esto pare -

Y cuando menos se lo espero, Izuku nuevamente lo abrazo con una fuerza increíble. Podía sentir y escuchar como la pequeña figura aferrada a su cuerpo temblaba y lloraba en su pecho, eso le había tocado el alma de muchas formas. Obviamente que el abrazo fué correspondido.

Esa tarde solo pudo confirmar que lo que sentía por Izuku era amor, lo amaba tanto que no quería volver a verlo sufrir ni mucho menos verlo lastimado, fue un amor que lo motivó aún más a convertirse en un héroe.

No le importaba ser un héroe por el dinero, ni la fama ni para superar a All Might como pensaba a inicios del año, se convertiría en un héroe por y para Izuku, un héroe que las personas como su hermano puedan confiar y sentirse seguras, un héroe que sea el espacio seguro de Izuku.

Porque todo lo que le importa en el mundo es que su pequeño sol brille.