Una entrega más del primer libro "MIRA AL CIELO|SIEMPRE SERÁ NUESTRA PROMESA", ahora llega la continuación "MIRA AL CIELO |2|. DE LO PERDIDO, LO GANADO"
Una nueva historia donde los secretos y las mentiras ya estan permitidas. Donde la traición cr...
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CAPITULO CUARENTA Y SIETE.
47-SEASONS IN THE SUN.
GIOVANNIE ALLEN.
-Bueno me parece perfecto- sonrió con malicia- Nos ponemos de acuerdo por mensaje y salimos, ¿Les parece?- pregunto el idiota y ellas asintieron embrujadas por el Teniente más sexy según ellas- Bueno. Entonces hasta luego hermosas.
-En 3
-2
-1
Nada. Ellas se miraron y sus rostros cobraron una expresión de sorpresa. Quise reírme de ellas pero tampoco tengo ánimos ni para celos ni mucho menos ánimos para reírme de bromitas.
-Creo que al fin entendiste que solo soy tuya- mi chica me abrazo mientras me daba cariñitos.
-Y yo soy de quien me de chocolates- expreso alzando las manos al aire.
Rápidamente saque una barra de chocolate de mi chaqueta y se lo di enseguida.
-Gio, tu no cuentas- sus ánimos decayeron al momento mientras hacia un puchero.
-¡Oye! Todavía que estoy aquí.
-Eso no vale, tu ocupas el número uno.
-Vamos a clase y nos ponemos de acuerdo durante el descanso. Esto se arma porque se arna, como que el chocolate es vida- exclamo mientras sus manos posaban en sus caderas- Ahora me voy si no Ed me matara- dijo y salió corriendo.
-Espero que nunca cambie- hablo amistosa mi prometida y reí. Realmente deseo lo mismo.
Estas 4 semanas he visto mi chica sonriente, feliz, libre, lista para un nuevo inicio. Pero sé que es mentira. Ella podrá actuar y fingir bien, pero sé que solo lo hace para no preocuparnos pero sobre todo, para que ella se lo crea. Sé que esto realmente aun no lo supera, aun ese corazón suyo llora cada día. Podrá mentirnos pero la veo salir al refugio de papá, podrá sonreír pero la veo perderse en sus pensamientos, podrá avanzar pero sé que aun piensa en el pasado.
Realmente quisiera golpearlo hasta que sangre, pero por más que mis puños aclamen el rostro de ese imbécil, sé que mi niña lloraría sangre. Y al final, no ganaría nada, al contrario solo intensificaría su dolor.
-Bueno, cielo, sigamos el buen ejemplo- rio por mi referencia hacia Bay.
-Está bien, guapo- me tomo de la mano y empezamos a caminar a nuestra área- Amor.
-Dime querida.
-Es sobre algunas cosas de la boda...- sus ojitos reflejaban que algo ocultaba.
-Amor, dime ¿Qué pasa?- detuve nuestra caminata.
-Es que... tú ya sabes- empezó a divagar nerviosa. Es algo serio- Yo... mi familia vendrá y...- Bingo. Sus ojitos me miraban esperando una respuesta a sus palabras.
