"Lo siento" (Meariri)

17: FINAL ✨🪩

TRES AÑOS DESPUÉS.

-no seas boba, Akira, quédate quieta.

-¡No saldré bien!

-¡Estás hermosa, pendeja!- Kirari intentaba sacarse una foto con Akira.

La contraria se sonrojo y dejo que la Momobami menor hiciera la foto.

-¿Para esto tanto lío?- dijo Ririka llegando a la sala con las dos chicas, mientras cargaba a Aiko en brazos, su pequeña niña de cabello blanco nieve y ojos ámbar.

-¡Mi sobrinita!- Kirari sonrió y abrió los brazos, Aiko sonrió estirando sus pequeñas manitos hacia Kirari. Con una
mirada cariñosa Ririka dejo a su niña en los brazos de su hermana gemela, ambas se abrazaron y Kirari comenzó a llenarla de besos por el rostro mientras la pequeña se reía.

Era impresionante lo bien que se llevaban, y lo dulce que podía llegar a ser Kirari. Aunque desde hace tiempo parece que es así, que ha cambiado por completo.

El teléfono de Ririka sono entonces.

-Es Mary.

Kirario se rió.

-¿Como te va la vida de casada y con hijos?

-Muy diferente a la tuya- le respondió Ririka con un puchero, pero sabía que aunque pudiera ser estresante, estaba muy feliz de tener la familia que tenía. Atendió- Si, ¿Amor?

-Riri, los medicos dijeron que nuevamente Fuku solo tiene un catarro, ya compré lo que hacía falta en la farmacia, ¡MEI ESTATE QUIETA! Dios con esta niña.

Ririka se rió, de las tres hermanas: Akiko era la bebé más tranquila que podía existir, solo quería ver dibujitos, abrazos y besitos en la mejilla. Fuku era la segunda más tranquila, aunque era un poco inquieta pero aún se mantenía serena y no daba mucho problema, eso sí, dormir no era lo suyo, se pasaba el día despierta jugando con puzzles. Y luego estaba Mei, un caso aparte: Era la que más se parecía a Mary; se enfadaba seguido, era muy inquieta y se la pasaba corriendo por la casa, te la podías encontrar tranquilamente en el suelo después de caerse brutalmente por subirse a la mesa, o pintando la pared con rotuladores mientras duermes.

-Te dije que era mejor que dejaras a Mei en la casa.

-Si lo hacía, sabes que hubiera tirado la casa. Pero en fin, llegó rápido. Solo te iba a decir que por favor ten la comida lista cuando llegues.

-¡Claro! ¿que quieres comer?

-Lo que sea que quieras está bien, ¡Mei deja a tu hermana! ¡Fuku! ¿donde vas? Tengo que colgar.

-Jeje, está bien.

Mary colgó.

-Es un lío tener tantos hijos.

-Kirari, ni que los tuvieras tú - se quejó Ririka sentándose a su lado.

-Pues eso es verdad.

Aiko se cambió a los brazos de su madre. Ririka sonrió.

-Además, para nosotras es estresante, pero también es divertido e incluso nos une más.