Lee's property › Hyunlix

! ୧ Cinco.

Hay algo que hace que el corazón de Hyunjin se rompa en algunas ocasiones, muchas a decir verdad.

Era un dolor punzante y profundo para su lobo y para él, porque sentir la lejanía de su novio nunca fue de su agrado y estaba seguro de que jamás lo sería.

Esta mañana, cuando supo que tendría que viajar a Latinoamérica para cerrar contratos con los servidores centrales, no le tomo tanta importancia, pero cuando se dio cuenta de lo que significaba, solo pudo sentir el gruñido de disconformidad del lobo en su interior, no quería separarse de su omega que tenía un cachorro en espera, era una tortura pensar que algo malo les podría pasar y él no estuviera presente para protegerlo.

Su Felix, su omega, era su todo junto a su cachorro, era la razón por la cual siempre quería volver a salvo para acompañarlo.

Pero, verlo ahora llorando lastimaba mucho su corazón.

—Lixxie, lix. Solo serán por algunos días, prometo volver lo antes posible, mi amor. Sal de la maleta, por favor, cariño.— Llama en un tono meloso tratando que su prometido saliese de la maleta, extendiendo sus brazos para que Felix se acomodara en ellos.

Felix sollozó dentro de la maleta; ignorándolo, abrazando su propio vientre mientras se negaba rotundamente a salir de la gran maleta que estaba sobre la cama.

—No llores, mi amor.— Beso, sus labios tratando de distraerlo, comenzando a acariciar sus cabellos con cariño. —no puedo llevarte, amor... Lo sabes.

—Sí, si puedes, seré bueno, me comportaré bien, lo prometo Hyunjinnie. Solo Ilévame ¿Si?— Felix pidió en un hilo de voz.

—Correrás muchos riesgos conmigo, Lixxie. Estás esperando un cachorro y tampoco puedes movilizarte mucho, el cambio de aire te puedes hacer daño, Seungmin te lo dijo.

El alfa trató de razonar, observando a su pareja aferrarse a la maleta, ahora con la mirada cabizbaja, a la par que pequeñas lágrimas caen sobre su camiseta.

—He matado a personas, Hyun. Puedo con esto, puedo viajar y defenderme, pero Ilévame ¿Sí? Seré un buen omega y estaré en silencio, solo no quiero separarme de ti... Alfa.

Hyunjin sonrió enternecido tratando de agarrar las manitos de su pareja, dando antes una caricia al vientre.

—Es peligroso, y s-si te llegara a pasar algo te juro que moriría, eres mi sol, mi única razón para siempre volver con vida. Solo quédate aquí, ¿puedes hacer eso por mí, mi amor?— habló mirando las mejillas sonrosadas.

—Pero... los calores, Hyun. Será como mi celo y y-yo, s-si tú no estás puede pasarme algo.

—Solo serán un par de días, tengo registrado tu calor amor, y si se llega adelantar estaré aquí lo antes posible.

Los ojos del más bajito brillaron ante lo mencionado, un poco más seguro de que Hyunjin realmente volveria rápido del viaje. Lix arreglo la camiseta que traia puesta perteneciente a Hyunjin, ladeando la cabeza a la vez que secaba sus lágrimas, solo minutos después vio como su alfa lo miraba antes de guardar otra prenda en la maleta.

—Te quiero, alfa.

Hyunjin sonrió volteándose, mirando como los ojitos de color azulino claro lo miraban fijamente, era puramente el omega.

Solo segundos después se pudo darse cuenta de que la camisa que envolvía el cuerpo de su pareja ahora reposaba un poco húmeda sobre el cuerpo de Felix.

—También te quiero mucho, omega.

Contestó acariciando los cabellos rosas, sus manos deslizándose en un frágil movimiento, llegando al vientre voluminoso y levemente blandito.

—También a ti, pequeño bebé. Cuida a papi por mí ¿Sí?— beso la barriguita. Felix hablo después.

—¿No te irás cómo los otros alfas que no me soportaban? Y-Yo— Preguntó entre pequeños sollozos

Hyunjin soltó un pequeño gruñido, viendo el dócil movimiento de su pareja al dejar su cuello a su merced, sabiendo que su gruñido era capaz de poner vulnerable al omega en un llamado de atención.

—No soy un alfa estúpido, cariño. Eres mi tesoro y no te dejaré, aunque te canses de mí.— bromeó con lo último, sonriendo cuando ve la risa florecer en el rostro aún agobiado de su pareja.

Más calmados un rato después.

Felix rodea como puede sus bracitos en el cuello de Hyunjin, sintiéndose más tranquilo ante la respuesta, sus feromonas rodeando el cuerpo más grande bajo sus brazos.

—Aparte si lo hiciera me puedes torturar, tienes la marca, sé que nunca me dejarías libre.

—Claro que te torturaré Hyunjinnie, solo que aún no.— el omega dice, una traviesa sonrisa en su rostro mientras Hyunjin besa las mejillas.

Los ojitos se vuelven pequeñas lunas, captando toda la atención del alfa. Se merecía una tortura por abandonar a su omega casi en el cuarto mes de embarazo, si eso lo tranquilizaba, lo soportaría.

Aunque, admitía que ver a Felix despertar dentro de su maleta, suplicando que lo llevará sería una linda anécdota para que algún día lo mencionara.

Más tarde, en el avión, no imaginó que su novio podría crear pequeños fastidios por la marca. Y que así sería todos los días durante el viaje.