Los últimos días de un amor

Capitulo 12

En la mañana desperté sintiéndome algo mal, con un terrible dolor de cabeza y ganas de vomitar. Nicol se preocupó mucho por estos repentinos síntomas. Así que llamó rápidamente a mi mamá.

-Descuida mi amor, voy a llamar a tu mamá para que pueda ayudarte, por favor no te vayas a mover de tu cama, no tardaré- dijo Nicol saliendo de mi cuarto.

Me quedé pensando en cama que la enfermedad ya estaba empezando a avanzar más y que poco a poco iría acabando con mis defensas hasta llegar a aquel punto. Y bueno, debía ser fuerte y poner resistencia para aguantar un poco más de tiempo.

Al rato regresó Nicol junto a mi mamá, estaba toda alterada por mi.

-¿Quieres que te lleve al hospital?, te noto muy mal y pálido, David- dijo mamá con cara de preocupación.

Pero la verdad es que no sentía que fuese algo tan grave y menos quería salir de casa. Así que le dije que no, que me quedaría y tomaría algunos medicamentos para aliviar los síntomas.

-No te preocupes mamá, solo tomaré algunos medicamentos para aliviar un poco el dolor de cabeza y vomitos, no es necesario ir de emergencia para el hospital- le respondí tratando de que se calmara.

Mamá dudo un poco de mi decisión, pero pudo tranquilizarse un poco. Salió en el carro hacia la farmacia a traerme algunos medicamentos. Ya que en casa no habían.

Mientras tanto Nicol se quedó conmigo procurando que nada grave me fuese a pasar a lo que volvió mamá de la farmacia.

-No entiendo por qué estos síntomas fueron tan repentinos, si anoche te encontrabas bien y energético, ¿Será que tú enfermedad está avanzando más?- preguntó Nicol muy tensa.

No me gustaba verla tan tensa y agobiada, no quería que por mi culpa empezará a tener bajones emocionales.

-Esto no va a pasar a mayores mi amor, solo es un mal momento para mí. Todos tenemos algún mal momento en cualquier día, quizás hoy fue el día fortuno- le respondí mientras acariciaba su mejilla derecha.

Al rato mamá había vuelto con los medicamentos, tomé los requeridos para aliviar los síntomas y no tener alguna sobredosis. Mamá me pidió que descansara durante todo el día y que hablaría con la universidad de que yo no podría asistir a clases por un tiempo.

Por un lado era algo bueno, no estaría preocupado e inquieto sobre mi rendimiento académico y podría aprovechar para descansar, hacer uno que otro hobbie que estuviera en mi capacidad. Como escribir, leer, ver alguna película y serie.
Y claro, todo esto lo haría junto a Nicol.

-Descuida David, voy a estar aquí contigo el tiempo necesario que necesites para que vuelvas a estar bien- dijo Nicol abrazándome.

También la abracé y me sentía tranquilo de tenerla presente, era lo que más necesitaba en ese momento.