Sin Salida [Lector x Pomni]

13. El reino de las pesadillas

Sentia que algo me faltaba, no me cuadraba del todo. Era claro, Caine estaba jugando con nosotros. Tan pronto como cerro el agujero que llevaba al sotano, mire a mi grupo. Eramos 4: Pomni, Jax, Ragatha y yo. Sentia que algo me faltaba, no me cuadraba del todo.

Caine: En fin, terminamos el juego, pueden volver al circo.

Dijo el señor mandibula. Parecia alegre, como si nada hubiese pasado, y entonces... Lo entendí. Zooble no estaba con nosotros. No pude evitar querer decir algo al respecto, pues Caine ya nos mandaba de vuelta al lugar de donde veniamos sin recordarnos de Zooble.

T/N: E-Espera, espera! ¿Que hay de Zooble? No me ire hasta encontrarla.

Caine: Oh! Claro! Casi la olvido por completo. Bueno, ella es-...

T/N: ¿Olvidarla? No eres real, eres una inteligencia artificial, tu no puedes olvidar nada.

Caine: Ah... ¿No?

Dijo ahora Caine con un tono extremadamente serio y ahora, tambien aportaba tension y amenaza hacia tu persona... o mejor dicho, todo el grupo.

Caine: Si, la olvide... Al igual que olvidare que te deje en un eterno naufragio en medio de la nada... Y sin nada.

Mientras hablaba, los escalofrios escalaban en tu espalda. Al acabar de hablar esucho la voz de Pomni, quien ve a donde va todo esto y de repente, grita.

Pomni: ¡Caine! ¡No-...!

Tras oir el chasquido de sus dedos, me quedo sordo y ciego. No veo ni escucho nada... Es como si me hubiera dormido. Entonces, desperté en medio de un bosque, rodeado de una niebla blanca que ocultaba los contornos de los árboles a mi alrededor. Estaba en una ruta desierta, sin un alma a la vista. La sensación de desorientación me envolvía, y no tenía idea de cómo había llegado allí. Miré a mi alrededor, y la niebla parecía extenderse hasta donde alcanzaba la vista.

Una camioneta estaba estacionada a un lado de la carretera, como si hubiera sido abandonada. Me acerqué y noté que no tenía gasolina, dejándome varado en este misterioso lugar. La inquietante quietud del bosque se rompía ocasionalmente con ruidos extraños que provenían de la densidad de los árboles a ambos lados de la ruta. No me sentía cómodo aventurándome allí, así que decidí quedarme cerca de la camioneta.

Fue entonces cuando noté algo en el espejo retrovisor. Una figura diminuta, apenas visible entre la niebla, estaba parada detrás de la camioneta. La forma de la niña era borrosa, y su apariencia me recordaba a una muñeca, mas especificamenten una especie de Ragatha, pero siendo una niña. Decidí salir para investigar, sintiendo que algo no estaba bien.

Cuando me acerqué al lugar donde debería estar la niña, no había rastro de ella. La niebla jugaba con mi percepción, y me sentí un poco desconcertado. Sin embargo, una repentina sensación en mi hombro me heló la sangre. Una mano fría, infantil pero escalofriante, me tocó, y una voz suave y perturbadora resonó en mis oídos.

"¿Estás perdido?" preguntó la voz, y giré para encontrarme con la mirada de la niña. Su rostro tenia la textura de una muñeca, pero a diferencia de Ragatha, esta tenia botones en sus ojos y al parecer, sangre seca proviniente de estos. Sentí un escalofrío recorriendo mi espalda mientras me quedaba parado, tratando de entender la extraña situación en la que me encontraba.

La niña permanecía inmóvil, como una figura de porcelana en medio de la niebla. Su presencia era desconcertante, y no pude evitar preguntarme cómo había llegado allí y qué conexión tenía con este enigmático bosque. La atmósfera se volvía cada vez más irreal, y mi instinto me decía que había algo más en este lugar de lo que podía percibir. La pregunta resonaba en mi mente: ¿estaba perdido, no solo en este bosque, sino en algo mucho más grande y misterioso?