Primer Caso......Un desastre sin duda: Parte 2

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Ya me encontraba listo esperando en la puerta del salón al objetivo de todo este largo día. Minutos más tarde, apareció aquella duquesa. Venía con un vestido rojo lo suficientemente modesto pero sin dejar de tener un poco de coqueterio en él . Se percató de mi presencia y enseguida se acercó, no sin antes un saludo mostrando respeto para poder entrar al baile. Ya listos y vestidos impecablemente, nos detuvimos frente a las majestuosas puertas del elegante salón de baile. El edificio de estilo clásico estaba iluminado por una suave luz dorada que resaltaba los detalles ornamentales de las columnas y los arcos altos. El sonido de la música en vivo se filtraba a través de las puertas entreabiertas, creando un ambiente algo mágico y emocionante..

Al entrar, pude notar el ambiente enérgico y sofisticado. La pista de baile estaba rodeada por mesas cubiertas de mantel blanco y decoradas con arreglos florales exquisitos. La gente vestida elegantemente charlaba animadamente mientras disfrutaba de bebidas y aperitivos en un ambiente de lujo. La música de la orquesta en vivo llenaba el aire, envolviendo a los presentes en una melodía cautivadora. La pista de baile, iluminada por candelabros colgantes que proyectaban una suave luz dorada, se convirtió en el epicentro de la diversión y la elegancia de los ricos.

Hombres y mujeres, vestidos con trajes y vestidos sofisticados, se movían con gracia y destreza por la pista de baile. Los rostros radiantes y las sonrisas iluminadas revelaban la alegría que sentían en esos momentos.  Algunos bailaban en parejas, mientras que otros se unían en grupos para charlar..

Mi acompañante desbordaba entusiasmo, y aprovecho a dirigirnos de una a la pista de baile. Teníamos música clásica y ella empezó sus movimientos que se sincronizan al ritmo de la entonada. Su cuerpo se movía con gracia y ligereza, siguiendo cada dirección y cada giro con una delicadeza y una precisión algo envidiables. En mi caso, tan solo trataba de usar pasos básicos de parejas que había aprendido en mi niñez. Después de un largo tiempo de baile, decidimos sentarnos en una mesa a charlar mejor.

- La noche está hermosa, ¿no lo cree duquesa?- comente tal como Larry me indicaba por el auricular.

-Usted está en lo correcto caballero- respondió con formalidad mientras llamaba a un camarero para pedir una bebida.

-Sabes? A veces se está tan sola en la cima, quisiera al menos esta encantadora noche pasarla con alguien dispuesto a estar conmigo- Declaró la duquesa, haciendo la indirecta mas directa sobre una propuesta de una noche.

-Hmmm...sabe, yo conozco a bastantes caballeros que matarían por estar con una damisela como usted- respondí tratando de persuadir el tema

-Yo sé que tengo a varios hombres detrás de mí pero, quiero a uno que esté a mi altura, de explicarlo de una mejor manera..-lo iba diciendo mientras se me acercaba acortando la distancia personal a escasos centímetros. - que pueda cumplir con todas mis expectativas.- Eso último que añadió me lo susurró al oído, dándome a entender que esta loca me quería a mi para esta noche.

-Emm, eso es algo muy- Iba a completar mi idea cuando por el auricular Larry comentó a recalcar .- Joven Zachary aprovecha el momento y traela al fondo del jardín -

-Muy..?- pronunció la duquesa esperando a que termine la idea

-Jaja, que tal si hablamos más sobre su "candidato perfecto" en un lugar más privado ¿No le parece? - Le respondí aprovechando la conversación para llevarla con Larry y terminar de una vez la misión.

-Y a dónde me quieres dirigir oh Joven Caballero- comentó de un tono de picardía

-Que tal si vamos un rato al jardín para hablar más del asunto y tal vez, después dirigirnos a otro lugar- Terminé de comentar para luego pararme y extenderle la mano para ir juntos. - Umm, me parece bien- contestó para aceptar mi mano e ir rumbo al terreno florido.

Aventura en el submundoWhere stories live. Discover now