Otro cuento de doumas👹
Pipipi se me dificulta hacer historias tipo rol se ven bonitas en mi mente pero no puedo pasarlas aquí puro estilo cuentico más fácil 😭🤡 bueno✨
Empezemos
Douma era un chico muy aplicado y responsable en sus estudios. Siempre sacaba buenas notas y tenía muchos planes para el futuro. Le gustaba leer, escuchar música y pasar tiempo con sus amigos. Era un chico alegre y tranquilo, que no se metía en problemas.
Un día, cuando volvía a casa después de la escuela, se encontró con un gato negro que lo miraba fijamente desde un callejón. Douma sintió curiosidad y se acercó a acariciarlo, pero el gato le arañó la mano y salió corriendo. Douma se sorprendió y se enfadó, pero no le dio mucha importancia. Se vendó la herida y siguió su camino.
Al llegar a casa, se sintió cansado y con sueño. Decidió tomar una siesta antes de hacer sus deberes. Se acostó en su cama y cerró los ojos. Lo que no sabía era que el gato negro era en realidad un brujo que le había echado un hechizo. Al dormirse, Douma comenzó a transformarse en un gato platinado/o blanco y esponjoso. (Obvie esponjose👹💅)
Cuando se despertó, se dio cuenta de que algo estaba mal. No podía moverse bien, ni hablar, ni ver su propio cuerpo. Solo podía oír, oler y sentir. Se asustó y trató de pedir ayuda, pero solo salieron maullidos de su boca. Se miró en el espejo y vio que se había convertido en un gato.
Douma entró en pánico y pensó que era lo peor que le podía pasar a alguien. ¿Cómo iba a volver a la normalidad? ¿Qué dirían sus padres, sus amigos, sus profesores? ¿Qué pasaría con sus sueños y sus metas? Se sintió triste y desesperado, y se escondió debajo de la cama.
Así pasaron los días, y Douma se fue acostumbrando a su nueva vida como gato. Aprendió a comunicarse con otros gatos, a cazar ratones, a trepar árboles, a escapar de los perros. Descubrió que ser gato tenía sus ventajas: podía dormir todo lo que quisiera, explorar lugares nuevos, jugar con otros gatos. También se dio cuenta de que ser gato era peligroso: tenía que evitar a los humanos, a los coches, a los venenos, a los cazadores. Douma vivió muchas aventuras y desventuras como gato, y poco a poco fue olvidando su vida humana.
Un día, cuando el sol se estaba poniendo, Douma se encontró de nuevo con el gato negro que lo había hechizado. El gato negro le dijo que había llegado el momento de romper el hechizo, y que volvería a ser humano. Douma se sorprendió y se alegró, pero también se entristeció. Había aprendido a querer su vida como gato, y le daba pena dejarla. Se despidió de sus amigos gatos, y siguió al gato negro hasta un lugar apartado.
Allí, el gato negro le explicó que él era un brujo que se divertía transformando a los humanos en animales, y que lo había elegido a él por su curiosidad. Le dijo que el hechizo duraba tres meses, y que si quería volver a ser humano, tenía que besar al gato negro. Douma se quedó pensativo. ¿Valía la pena volver a ser humano? ¿No sería mejor seguir siendo gato? ¿Qué pasaría si el gato negro le mentía?
Douma tomó una decisión. Se acercó al gato negro y le dio un beso en la nariz. En ese momento, sintió un cosquilleo en todo el cuerpo, y volvió a transformarse en humano. Se miró las manos, los pies, el rostro, y se reconoció. Se sintió feliz y aliviado, pero también nostálgico. Miró al gato negro, y le dio las gracias. El gato negro le sonrió, y le dijo que había sido un placer conocerlo. Luego, desapareció.
Douma volvió a su casa, y se reencontró con su familia y sus amigos. Les contó lo que le había pasado, y nadie le creyó. Pensaron que se había inventado una historia para justificar su ausencia. Douma se resignó y siguió con su vida normal. Volvió a estudiar, a leer, a escuchar música, a pasar tiempo con sus amigos. Pero nunca olvidó su experiencia como gato, y siempre guardó un cariño especial por los felinos. A veces, cuando veía un gato blanco y esponjoso, se preguntaba si sería uno de sus antiguos amigos. Y a veces, cuando se sentía aburrido o agobiado, se preguntaba si no habría sido mejor quedarse como gato. (jasjkJas sería ese 👻)
