Digimon -Away- (Lejos)

CAPITULO 3: Un poco de distracción

Tal y como dijo Yamato, Mimi trato de no hablar del tema, ni de mencionarle nada de las pesadillas, su objetivo en especifico era que Taichi tratara de pasarla bien.

Pero aunque el día llegó para tener la cena, Taichi no podía quitarse de la cabeza esas preocupaciones.

Llegaron al restaurante y se quedaron en su mesa con la vista de las alturas de la ciudad.

Mimi estaba realmente contenta por estar ahí, pero Taichi trataba de fingir, no lo lograba, y evidentemente Mimi lo notaba.

Mimi quería hablar de alguna forma de lo que había mencionado Yamato sin que se notara que sabia algo pero que a la vez Taichi no lo dijera como si estuviera obligado a contarselo.

Ya sabia lo que Taichi sentía, simplemente quería alegrarlo ya que primero pensó que el hecho de salir con ella le molestaba a Taichi, pero sabia que no podía ser eso, tampoco el hecho de tener las mismas pesadillas, era por la incomodidad de ser vigilado todo el tiempo.

Mimi: ¿Estas bien Taichi-san?

Taichi: ¿Que? Claro-Dijo algo distraído

Mimi: Pues llevamos un tiempo aquí y casi no has comido...

Taichi: Sí, lo sé, lo sé. Es solo que estoy un poco distraído. Lo siento

Mimi: Note que estabas distraído desde el principio, pero ahora lo estas más

Taichi: No te preocupes, estoy bien, estoy bien -Dijo con una sonrisa nerviosa

Mimi: Sabes que no es cierto-Dijo un tanto molesta

Ambos guardaron silencio un momento ya que claramente Taichi no quería hablar sobre nada pero Mimi sabia que si Taichi no se quitaba ese peso de encima, no importaría, siempre se sentiría preocupado.

Taichi se comenzaba no solo a sentir mal por el mismo, si no porque tambien veía a Mimi preocupada y era lo que menos quería ahora mismo. Quería buscar distraerse de los porblemas pero le era imposible y empezó a provocar más con los sentimientos de Mimi.

Taichi continuaba desviando la mirada hacía la ventana del restaurante donde se miraba la ciudad. Mimi miraba la preocupación que tenia cuando miraba afuera.

Mimi: Taichi-san, dime lo que pasa. Tu no eres así. Cambiaste desde que has tenido esas pesadillas

Taichi: ¿Sí?

Mimi: Sí

Taichi: No... no es a propósito...

Mimi: ¿Sabes?-Dijo mientras sujetaba su vaso de agua que estaba en la mesa y miraba el reflejo-Cuando me mude a Estados Unidos tenía miedo de estar en un lugar desconocido y estar rodeada de tanta gente que no conocía, me sentía observada, tantos ojos sobre mi

Taichi: Eso...

Mimi: Fue muy incomodo, me ayudo mucho el tratar de avanzar ante esos ojos y buscar otros ojos en los que sí me sentía cómoda. Al regresar a Japón sentí casi lo mismo por pasar tantos años lejos, pero los tenía a ustedes, con ustedes esa sensación desaparece-Dijo con una sonrisa tratando de calmarlo