Capítulo 26

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2 años y 6 meses después

Bianca Miller

La vida es impredecible, nadie sabe que le depara el destino o lo que pueda traer junto a él, pero tengan por seguro todas las cosas que suceden en tu vida ya sean buenas o malas tienen un por qué, una razón.

Puedes llegar una vida feliz y tranquila hasta que llega algo a desestabilizarla, a volverla caótica, eso me paso a mí cuando me entre de una verdad que por tanto tiempo ocultaron, pero tarde o temprano salió a la luz e hizo que mi mundo colapsara y por tratar de olvidar apareció un ser de una noche y me dio a mis dos más grandes tesoros, a mis pequeños los cuales tienen 3 años, el tiempo pasa muy rápido por eso debemos disfrutar cada momento al máximo.

Conocer a aquellas personas que siempre fueron parte de tu vida, te genera una emoción que es difícil de explicar es una mezcla de felicidad y a la vez miedo, pero les digo algo cuando llega ese momento del reencuentro el miedo se vuelve en una felicidad incomparable que llena todo tu ser.

El destino me ha enseñado que todo llega a su debido tiempo solo debemos ser paciente.

Hace 6 meses volví al modelaje, Bianca Miller estaba regresando al mundo de los negocios de a poco.

Mi madre sigue en el ambiente de las telas y tiene su empresa de textiles "Esmeralda" y yo no dude en hacernos socias. 

Los negocios de los hoteles aún los mantengo al margen estoy esperando a hacer la entrada maestra.

Hoy regreso a Alemania, hace 2 días me invitaron a ser partícipe de una pasarela en Italia a la cual asistí y mostramos los nuevos conjuntos de verano.

Entro en silencio ya son las 2 de la mañana y todos en casa se encuentran durmiendo, me dirijo al cuarto de Liam y veo a tres personitas, siempre que salgo ellos se vienen a dormir con su tío para pasar sus noches de pijamadas.

No me gusta viajar sin ellos, no quiero estar lejos ningún segundo, los extraño demasiado, pero tampoco quiero exponerlos al mundo aún son muy pequeños.

Mi estrellita se encuentra al lado derecho cada vez se va pareciendo más a mí, una mini Bianca la llaman mis padres y mi ojitos de cielo al otro lado él irradia una belleza única al igual que su hermana y esos ojitos azules tan profundos me encantan, pero les digo algo me llega a sacar canas verdes mi pequeño revoltoso y cuando se complementa con su hermana es un caos total la casa y aun me pregunto dé quien sacaron ese carácter posesivo y celoso.

Beso sus frentes, los tapo para luego dirigirme a mi dormitorio, estoy a punto de quedarme dormida cuando siento pasitos, como susurran y se suben a la cama.

—Mami esta mimiendo, no debemos despertarla—susurra bajito mi estrellita.

Siento como besan mis mejillas ambos y se acuestan cada uno aún lado.

—Buenas noches, mami —susurra mi ojitos de cielo para luego acurrucarse.

—Te amamos mucho, mami—susurra mi niña haciendo lo mismo que su hermano.

Siento como ambos comienzan a quedarse dormido y yo sonrió.

—Buenas noches mis pequeños —beso sus frentes y los acurruco más a mi lado.

No saben cómo los extrañe, pero también sabía que si habría mis ojos nos quedaríamos despiertos hasta tarde por eso mantuve mis ojos cerrados. Me quedo dormida con ellos en mis brazos.

Abro mis ojos y veo a mis dos pequeños aun durmiendo ambos tienen sus manitos unidas sobre mi pecho. 

No me canso de verlos, eran lo más precioso que el mundo me dio, ellos me dieron el título de madre.

Eras todo lo que necesitaba [EN PAUSA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora