The Last Time (C.L)

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Charles.

Lissie iba nerviosa, quizá no tan nerviosa como yo. Miraba a la chica levantar la falda de su vestido y meter su mano entre las piernas.

-Tranquila, estaremos ahí pronto- comenté esquivando a los peatones.

-¿Puedes ir más despacio? Me pone nerviosa ver qué la velocidad aumenta cada vez más.

-¿Y si sale dentro del auto?

-No va a salir dentro del auto- agachando su cabeza.

-Te vas a lastimar.

-Deja de verme y conduce- ordenó- ¿No se suponía que los partos deben de doler?

Aquello me alarmo, había leído diez libros y en todos mencionaban acerca del dolor durante y después de los primeros días.

Aceleré aún más, el hospital estaba cerca. Me detuve frente a la puerta de urgencias.

-¡Un médico!- grité desde adentro.

Un par de enfermeros se acercaron con una silla de ruedas.

-No puedo quedarme aquí, pero estaré ahí pronto- le dije viendo como le ayudaban a sentarse.

Estacioné el coche y salí de ahí con mi celular en la oreja.

-Charles, ¿En dónde están?

-Lissie sintió la cabeza de Jules- le dije a William.

-¿Eso es posible? Carajo, le diré a Henry... Olvídalo, creo que está bailando, ¿Le digo a mamá?

-A quién quieras, solo asegúrate que sepan que estamos aquí.

-Bueno le diré a Arthur- murmuró.

Corte la llamada y entre al hospital. Una enfermera seguía a Lissie de su lado izquierdo mientras otro le llevaba.

-¿La van a llevar al quirófano?- pregunté llamando su atención.

-Tenemos que revisarla primero- me respondió uno.

-Por lo que dice la paciente, el bebé está ya por salir.

-¿Por qué no siento dolor?- pregunto Lissie.

-Muchas mujeres no sienten dolor...

Nos metieron a un cuarto y le dieron a Eloise una prenda nueva de ropa. Salieron dejándonos solos.

La chica trato de vestirse con rapidez- Le he avisado a William que estamos aquí- dije esperando a que saliera del pequeño baño.

-Debiste hablarle a Mackenzie, necesitamos la maleta que he preparado.

-La llamaré en un segundo- le miré salir, Lissie se sentó en la camilla.

-Creo que ya estoy comenzando a sentir dolor, no es mucho pero las punzadas son dolorosas.

Bese su sien. Había creído que los días 13 de cada mes daban un poco de mala suerte.

Aún no había entendido como es que Henry había decidido casarse en un 13.

Un grito de dolor de Lissie me hizo salir de mis pensamientos. No me había dado cuenta que los enfermeros estaban ya dentro.

Lissie estaba ya conectada con suero y su ginecólogo estaba también en la habitación.

-Ya está totalmente dilatada- dijo alejándose de ella- Vamos a proceder- me miró- Es mejor que se cambie si quiere estar presente.

-¿A dónde la llevan?