Familia de Estrellas

18. Lo que sufrimos

Hey, he aquí una rosita que se atrevió a actualizar:v

últimamente no me he sentido bien y no he escrito mucho, además de que llevo unos cuantos días sin celular. Pero haré lo que pueda para poder escribir.

sin más que decir. comiencen a leer (perdón si hay errores ortográficos)

Zack

Las horas estaban pasando con normalidad

Mara estaba jugando con una muñecas mientras Edén pasaba el rato su videojuego. Yo, como todas las mañanas, estaba viendo por la ventana observando a la personas que salían y pasando el rato en el patio en el hospital, esas personas que sí estaban vivas y no que dependían de una máquina para poder respirar

« A veces me pregunto cuándo se terminará esto. Y si alguno de nosotros podrá volver a vivir»

Sonreí negando la cabeza, qué pensamientos tan locos son los míos. Pero claro que ellos podrán regresar a la vida cotidiana. Estaban revisando a Mara estos días, puede que haya una oportunidad. Y Edén, su caso no fue tan grave cómo pensaron, todos van a vivir

En cambio yo bueno...

Arrugo las cejas al escuchar algo a lo lejos, sacándome de mis pensamientos.

Y como soy un gato curioso, decido averiguar qué pasa

Los murmullos a veces en las paredes son asordecedores por lo que cuando voy cruzando me tapo uno de mis oídos, agudizando también los sentidos para saber cuál de tantos es el que me ha llamado la atención

Me detengo por el pasillo cuando la enfermera grita el nombre del doctor. Es extraño, el hospital suele ser muy tranquilo y no llaman así a nadie como si nada.

Decido acercarme cuando el doctor llega. Entonces, escucho todo

– Por favor ¡Por favor! –se oye en la línea telefónica– encontré este número en su cuarto, necesito que vengan lo más pronto posible.  Ella... Ya casi no respira... –empezó a sonar entrecortado– sus brazos tienen mucha sangre, ¡No sé cómo detenerlo! Y sus piernas...  –fruncí el ceño ante el sollozo en la línea–. Solo vengan rápido, ella no puede morir

«¿Morir?» Elevé una ceja con curiosidad, ¿Un caso de vida o muerte? ¿Qué habrá echo esa chica?

No esperé más preguntas cuando ví que la ambulancia salía al rescate de dónde sea que estuviera pasando esto. Con una sonrisa entusiata comencé a seguirlos

– Ay... Hace tanto que no salía de aquí –suspiré sintiendo el aire fresco sonriendo para mis adentros. Iba lo más rápido que podía junto a la ambulancia, sus luces y sonidos sonando por todo el camino– ¡Uh! Pero miren que es esto –comenté al aire, igual sabía, que nadie me podía escuchar.

Sonreí llegando a la casa donde se veía que iba el vehículo... No estaba seguro si era esa, pero mi instinto dijo que si

Como perro por mi casa pasé por la ventana más cerca

Y lo que vi... Vaya, era inquietante

Me senté en la ventana mientras contenplaba a la chica

Su cabeza estaba comenzando a colocarse morada por la falta de aire por la soga en el cuello, esa misma que alguien se la quitó con cuidado, pues ahora estaba con ella en el suelo, él llorando por ella y ella... de esa manera solo parecía que estaba durmiendo en sus brazos. No reaccionaba, ¿Tomó soniferos tal vez?