three; pretty

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Muchas veces sus familiares molestaban a Yuuji por haber escogido una pareja como Gojo Satoru. Algo que empezaba a cansarlo.

“Es solo un albino ricachón, no tiene nada especial. Solo es una cara bonita y ya. Te convenía casarte con otro Alfa que realmente valiera la pena con Nanami o ese guapo abogado.”

Y tenían algo de razón, Satoru solo era bonito.

Era bonito cuando le preparaba chocolate caliente en un día frío, sirviendo la bebida en su taza favorita de cinamonroll.

Era bonito cuando lo consolaba por toda situación que afectara su día. Que mientras lo escuchaba quejarse le diera un cálido abrazo que hacía a su corazón palpitar acelerado.

Era bonito que lo conociera tan bien como saber que odiaba el calor pero amaba comer helado de fresa, y amaba el frío pero odiaba sentir sus huesos entumecidos. Saber que prefería a las cantantes femeninas, que sus bandas favoritas eran twice y bangtan. Que tenía un serio rechazó por la familia Kardashian y odiaba a Kanye West. Que su canción favorita de Taylor Swift siempre sería Style. Que no le gustaba opinar sobre la vida de los demás. Que su color favorito era el rosa y no el rojo como todos pensaban. Que la parte de su cuerpo que más le gustaba eran sus ojos por que le parecía maravillosa esa capacidad para observar de varios colores la vida.

Era bonito que a la hora de hacer el amor le dijera una y otra vez lo hermoso que era, y que al finalizar el acto le diera besos por todo el cuerpo para según el sellar su amor.

Era bonito que cuando alguien trataba de coquetear con el se pusiera a hablar de el como si fuera la primera maravilla del mundo. Recalcando que era el amor de todas sus posibles vidas.

Era bonito que investigara sobre sus gustos, y que cuando le compraba algo decía “Lo ví y recordé que a ti te gusta. Así que lo compré para ti mi amor.”

Era bonito como aparentaba ser el coqueto de la relación, pero que cuando estaban juntos se sonrojara por el mínimo algo.

Era bonito que lo tomara de la mano casi siempre, y repartiera muchas besos en ella.

Era bonito que cuando saliera a trabajar le dejara notitas con stickers de gatitos diciendo lo mucho que lo amaba y que no quería despertarlo por que le parecía muy lindo.

Era bonito que siempre le prepare el desayuno en forma de animalitos.

Era bonito que siempre pudiera su opinión en situaciones de la empresa o asuntos familiares que parecían ser confidenciales.

Era bonito que tuviera más fotos de Yuuji en su celular que de el mismo.

Era bonito que se preocupara de sus mascotas como si de sus hijos se tratara. Y que siempre los defendiera de los familiares metiches diciendo “con mis niños no, si les incómoda mejor vayanse de mi casa a la verg-”

Era bonito como hablaba ilusionado de tener una familia con Yuuji.

Era bonito que desde que se conocieron le dijera apodos lindos aún sin ser novios. Y la manera tan clara en que confesó sus intenciones de pretender cortejarlo.

Era bonito que cuando estaban separados le enviara muchos audios y videos diciendo lo mucho que lo extrañaba. Y haciendo videollamada donde compraba gorros tontos y algún accesorio y fingía ser otra persona.

Era bonito como al más mínimo cambio de humor por su parte le estuviera preguntando “¿Te encuentras bien mi amor?”

Era bonito que cuando estuviera celoso parecía niño chiquito haciendo berrinches y terminara pegado a su pecho diciendo que odiaba ser tan celoso pero que no podía evitar sentir frustración de que alguien intentara coquetear con el amor de su vida. Y después llorara diciendo lo mucho que agradecía poder compartir su vida con el.

Era bonito que siempre lo defendiera de cualquier persona.

Era bonito que cuando miraban películas de terror tapé sus ojos en las escenas más espantosas.

Era bonito que lo acompañara a ver asmr para dormir o relajarse.

Era bonito que siempre le enseñara palabras en otros idiomas que significan apodos bonitos.

Era bonito que actuara como un padre celoso cuando su su gato era cortejado por otro gato macho. “Largo de aquí gato rompe hogares, nuestro pequeño Gummie no está interesado en realizar el apareamiento contigo, shu shu”

Era bonito que lo acompañe a ver caricaturas viejitas o casos criminales.

Era bonito que aún después de haberse casado todavía haya cosas nuevas que experimentar a su lado.

Sin duda, todo en Satoru Gojo era bonito.


























Algo equis, pero es que yo amo el Goyuu y personalmente me imagino a Satoru siendo un Alfa que se pone nervioso ante su Omega culon :3

my love |𝐆𝐨𝐘𝐮𝐮Donde viven las historias. Descúbrelo ahora