Solo Mio (Minsung)

Cap.38👑

Minho estaba en los pasillos del castillo, quería entrar y estar con sus cachorros y su Omega pero este se negaba, cada vez que intentaba abrir la puerta está era bloqueada por su esposo; así pasaron todo el día evitándose

— Jisung , cariño, por favor

— Minho es inútil, espera hasta mañana cuando tú Omega se sienta de buen humor

— no pienso esperar padre, quiero estar con mis hijos y mi esposo, no entiendo porque se puso en esa actitud

Jisung se encontraba en la cama dándole calor a sus cachorros mientras bebían leche, pero el Omega se sentía un poco débil ya que no había comido en todo el día, escucho que la puerta se abrió, estaba a punto de gruñir cuando sintió un aroma familiar, era Minho

nuevamente, Jisung quería dejarlo entrar a su nido, pero si lobo lo rechazaba

Minho entro dejando sobre la mesa una bandeja de comida, era sopa caliente, panes y frutas, despertó el hambre de su Omega quien seguía protegiendo a sus cachorros, el alfa retrocedió hasta salir de la habitación; Jisung se aseguró de que no hubiera nadie en con el y se acercó a comer mientras sus pequeños dormían.

El alfa asechaba por la perilla para asegurarse que su Omega comiera y así fue; Jisung se acostó y se quedó dormido junto a sus hijos. Al día siguiente el Omega despertó asustado al ver a Minho sentado en un rincón de la habitación

— buenos días amor ¿Dormiste bien? — pregunto el alfa de brazos cruzados y poniéndose de pie

— Minho ¿Qué haces aquí?

— veo que estás más relajado cariño, y no soy solo Minho, soy tu esposo

— vete de aquí Minho

— ¿Por qué? No saldré de esta habitación hasta que me digas que está pasando contigo Jisung tomo una almohada de la cama arrojándosela a Minho quien la detuvo con su mano

— dime de una vez porque estás molesto conmigo y porque decidiste sacarme de tu nido y lo peor... Que ya no quieres que sea tu alfa ¿Porque? — dijo el lobo de Minho triste

— tu no eres mi alfa Minho

— ¡Si lo soy! ¡Estamos casados! ¡Y los cachorros también son míos! ¡Pareciera como si ya no me quisieras en tu vida!

— ¡Es que ya no te quiero en mi vida ni en la de mis cachorros Minho!

— ¿Por qué no? ¡Dime! — los ojos rojos del alfa se hicieron presentes — ¡Dime! ¡Yo soy tu alfa!

— ¡No te atrevas a usar ese tono conmigo Minho! — respondió molesto el omega

--¡Tu eres mi Omega!