Navidad 2

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— ¿Pero esto va así o cómo? — Dije mientras enseñaba una lata a la cámara de mi teléfono.

— Lo viertes lentamente para evitar grumos. — dijo mi madre viendo todo lo que hacía.

— ¿Cuantos minutos dejo la carne en el horno?

— Querida... Son horas... Debes dejarla horas para que se cosa bien y agarre el sabor de los ingredientes.

— ¿Qué? Por eso cuando llegaba a casa nunca veía la carne.

— Así es, solo asegúrate de verla a ratos para evitar que se queme... Cada media hora.

— Es mucho trabajo...

Dije y mamá rió, eran las 9 de la mañana y yo ya estaba cocinando como si alguien fuera a venir.

La ensalada de manzana, recuerda que la nuez debe ir triturada y-

— Leche condensada y yogurt, lo sé... Yo siempre hacía eso. — conteste alegre mientras sonreía cortando la verdura y moliendo el adobo de la carne.

La pasta, no la cortes por favor...

— Solo fue una vez mamá... No es para tanto.

Pase así una hora platicando con mi madre preguntando sobre recetas, ella tuvo que ir a comprar las últimas cosas para la cena y yo me quede en la cocina poniendo nuevamente música, cuando me asegure que la carne ya estaba preparada para ir al horno, la metí con cuidado y me quede ahí agachada viendo la luz de éste y suspiré.

Justo cuando inició mi canción favorita tocaron a la puerta, hice un pequeño puchero mientras me levantaba y pausaba la música, supuse que era algún amigo por lo que no me fije que estaba desarreglada.

Dije que no quería visitas inesperadas... — Dije mientras abría la puerta y bostezaba.

Lo siento, no escuche aquello anoche. — mis ojos se abrieron de golpe al reconocer la voz, trague pesado y nerviosa salude.

G-Graves... — Dije riendo sin saber que decir o hacer.

Buenos días, ahora... ¿Me dejaras entrar o me congelare aquí?

Negue con mi cabeza y me hice a un lado para que entrará, acomode mi cabello despeinado y sacudí mi ropa mientras cerraba la puerta.
Mis ojos se fijaron en una bolsa que él traía en la mano.
Quería hablar pero no sabía que decir o de que hablar más bien.

— ¿A qué debo tu visita?

— Si no me quieres aquí, me voy.

Negue rápidamente con nervios moviendo mis manos y acercándome al sillón donde se había sentado, mi serotonina incremento al escuchar su risa y mis ojos se fijaron en él.

Solo bromeo, honey. — dijo relajando su cuerpo en aquel mueble, yo me quede parada sin saber que más hacer, ese hombre me cohibía y no sabía por qué... — huele delicioso, no imagine que alguien tan delicada como tú fuera buena cocinera.
Dijo y reí nerviosa.

Fue gracias a mi madre y sus consejos... De lo contrario mi casa estaría incendiada.

— ¿Es la primera vez que pasas las fiestas lejos de casa?

— Sí... Quiero decir, perdió toda la magia desde hace algunos años sin embargo no es lo mismo que estar lejos de.

— ¿La magia?

— Ya sabes, de alguna forma en una determinada edad ya no sientes nada en estos días... Parecen como cualquier otro... Supongo que solo fue la etapa de resignación al saber que Santa Claus no me traería nada... — Dije en voz baja cruzandome de brazos y suspirando.

Phillip Graves/ headcanons y one shortsWhere stories live. Discover now